En una entrevista en el diario Handelsblatt, Hernández de Cos incide en que “si no es ahora” el momento de emitir bonos de deuda europea, “¿cuándo?”. Afirma que “es hora de ser solidarios y eficientes en el uso de los recursos de la Unió Europea, que son muchos, y por eso es necesaria una respuesta ambiciosa y coordinada a escala europea” como puede ser con los eurobonos, según indica.

Por otra parte, asevera que en el Banco Central Europeo (BCE), del que es miembro de su Consejo de Gobierno, “estamos dispuestos a aumentar el tamaño o la duración de nuestras compras de activos, así como ajustar su composición, tanto como sea necesario” y que los límites a comprar hasta un tercio de bonos en circulación de los países “deberán ser revisados si dificultan el cumplimiento del mandato del BCE” de preservar la estabilidad de precios.

Asimismo, considera que la política monetaria “ya ha reaccionado” y los gobiernos han adoptado medidas. En esta línea, cree que son necesarias otras actuaciones europeas y es “imperativo, tanto por razones de solidaridad como de eficiencia, que compartamos los riesgos presupuestarios de los Estados miembros derivados de esta pandemia entre los socios europeos”.

El gobernador del Banco de España apunta que los efectos de la crisis sanitaria van a ser “muy significativos en el corto plazo” y que existe una “posibilidad real” de recesión en la zona euro como consecuencia. Precisa que la pérdida de actividad “puede ser comparable a la de 2008-2009”, pero confía en que “el daño no será tan persistente en el tiempo”.

ESPAÑA

En cuanto a la situación en España, aunque destaca que la deuda del sector privado “no es especialmente elevada”, sí incide en que no se ha aprovechado la etapa expansiva para reducir la deuda pública. “Ahora, la prioridad es asegurar que todos los agentes, públicos y privados, tengan condiciones de financiación holgadas”, señala, y agrega que cuando pase esta etapa, se debería retomar la senda de consolidación fiscal.

Asevera que en este momento se requiere una “acción rápida, enérgica y coordinada” de los responsables de la política económica en España, después de que se haya aprobado un programa de ayudas por 200.000 millones de euros, el 20% del PIB. Hernández de Cos subraya que si se corta la financiación a los agentes privados “haremos que los efectos de la crisis sean mucho más agudos”.

Aunque señala que es “previsible” que algunos de los clientes de los bancos tendrán dificultades para pagar sus préstamos en el corto plazo, pone en valor que los bancos europeos “tienen colchones de capital y pueden refinanciar estos préstamos, especialmente tras la aprobación de los importantes paquetes de ayuda nacional con garantías y avales del Estado y las medidas aprobadas en el ámbito de la política monetaria y prudencial” por parte de las autoridades europeas.