Abusos policiales

Amnistía denuncia al menos dos homicidios, abusos y detenciones ilegales en la frontera entre Grecia y Turquía

- Exige a Grecia y a la Unión Europea descongestionar los centros de detención y los campos de refugiados

MADRID
SERVIMEDIA

Amnistía Internacional denunció al menos dos homicidios y cientos de abusos policiales y detenciones arbitrarias contra migrantes y solicitantes de asilo en la frontera entre Grecia y turquía, en un nuevo informe publicado este viernes a partir de diferentes investigaciones sobre el terreno.

En un comunicado, Amnistía instó a Grecia y a la UE a resolver la situación de las personas hacinadas en los centros de detención y en los campos de desplazados. Explicó que desde el 27 de febrero, miles de refugiados sirios y de otros países se dirigieron a la frontera griega animados por las autoridades turcas que les facilitaron la marcha hacia allí.

Sin embargo, Grecia reprimió la circulación de quienes intentaban cruzar su frontera terrestre y marítima, reforzando los controles con el envío de fuerzas armadas, 52 barcos y más efectivos de la agencia Frontex de la UE.

Según Amnistía, las fuerzas de seguridad griegas hicieron uso de gases lacrimógenos, cañones de agua, proyectiles de plástico y munición real, con el resultado de dos hombres muertos y de una mujer desaparecida desde hace semanas, que probablemente también ha fallecido.

La investigación aporta asimismo testimonios de muchas personas sirias golpeadas, detenidas de forma arbitraria y devueltas a Turqía de forma ilegal.

DETENCIONES ARBITRARIAS

En las islas del Egeo, a todas las personas llegadas después del 1 de marzo de 2020 se les encerró en centros instalados en los puertos y otras zonas, donde no podían solicitar asilo y se exponían a ser devueltas a Turquía o a países de “origen o tránsito”. Sólo en Lesbos, alrededor de 500 personas -entre ellas, más de 200 niños y niñas- fueron recluidas durante más de 10 días en un barco de la Armada griega utilizado normalmente para transportar tanques y otros vehículos militares. Centenares de solicitantes de asilo y migrantes más fueron a parar a otros centros instalados en puertos de todo el Egeo.

Finalmente, el 20 de marzo, todas las personas retenidas en las islas fueron trasladadas a centros de detención del territorio continental griego con más capacidad, donde están ahora a la espera de que se decida su devolución sin poder solicitar asilo.

Grecia paralizó cualquier solicitud de asilo durante un mes y, aunque desde ayer dicha ley excepcional ya no está en vigor, la suspensión del servicio de asilo a causa del coronavirus impide a estas personas reclamar protección internacional.

Por todo ello, Amnistía instó a Grecia a "cambiar en seguida de rumbo y permitir el acceso de todas las nuevas llegadas a procedimientos de asilo y servicios básicos". "Debe sacar a la gente de los centros de detención y los campos de acogida insalubres y proporcionarles alojamiento seguro y adecuado", agregó."La rápida propagación del Covid-19 hace que sea aún más urgente”, resaltó Amnistía.

Asimismo, instó a “los países europeos a tomar medidas efectivas y significativas para reubicar desde Grecia a solicitantes de asilo y reasentar desde Turquía a personas refugiadas".

"Si se establecen los debidos controles de salud pública y cuarentenas, el coronavirus no tiene por qué ser un obstáculo para proporcionar seguridad a personas que se han visto obligadas a huir de sus hogares", concluyó.

(SERVIMEDIA)
03 Abr 2020
AGQ/mjg