Así lo desvela una consulta realizada por la compañía de investigación de mercados y de opinión Ipsos a través de su Comunidad What&Why y que también revela que en esta fase de resistencia la incertidumbre es "la protagonista" y la "tensión" aumenta con el tiempo, afectando el estado de ánimo y las relaciones”, según puntualizó este viernes la compañía a través de un comunicado.

A su entender, ese escenario se ve "agravado por la incertidumbre sobre cuánto va a durar esta situación” y en él también advirtió un incremento de las emociones negativas ante un “futuro incierto, sobre todo a nivel económico y laboral”.

En este sentido, Ipsos ha lanzado a las marcas una serie de recomendaciones para ayudarlas en la comunicación con sus consumidores dependiendo en la fase en la que estos se encuentren, ya que, si en las fases de ajuste y aclimatación estos “buscaban empatía y acompañamiento", ahora que, "poco a poco", empiezan a instalarse en la fase de resistencia, lo que más demandan es "que les ofrezcan certidumbre”.

Por ello, instó a las compañías a “generar promesas concretas o desarrollar actividades win-win”, en las que ambas partes ganan, así como a aportar “seguridad” a los clientes, teniendo en cuenta que, de cara a la etapa posterior al confinamiento, los "planes más deseados" son los deportivos (para el 68% de consultados), el cuidado personal (51%) y el regreso a los establecimientos de restauración (35%) y cines (para el 28% de consultados).

Según Ipsos, que ha seguido la evolución en el caso de España a través de estas fases realizando una consulta semanal a su comunidad What&Why, las etapas de incredulidad, preparación y ajuste se caracterizan por la “confusión y miedo inicial, la implementación de cambios de rutina y la adaptación a las nuevas restricciones”. “Tras la etapa de ajuste llega la de aclimatación, donde nos hacemos a la nueva rutina y empezamos a descubrir nuevos intereses”, abundó, al tiempo que advirtió de que España está “pasando varias etapas a la vez, con la población dividida en tres fases mayoritariamente”, en referencia a las etapas de ajuste, aclimatación y resistencia.

“Vemos que aumentan los ciudadanos que ya se sitúan en las últimas fases de alivio y hay un salto destacable a la de temor”, indicó la consultora, para, a continuación, señalar que la “principal tendencia” es la “transición” de los ciudadanos españoles hacia la fase de resistencia, “con la mayoría ya instalados en ella”.

Además, confirmó que la población no evoluciona de la misma manera en lo que a estado emocional se refiere y afirmó que la llegada de cada fase “no es exacta sino que depende mucho de la gestión emocional de cada individuo frente a esta situación nunca antes vivida”.