Según informó este martes el Instituto Armado, uno de los detenidos en la denominada 'operación Breda' adquiría las armas detonadoras y las transformaba en su domicilio para que hicieran fuego real. Los otros dos arrestados se dedicaban al tráfico de sustancias estupefacientes.

La Benemérita, que tiene la competencia en España sobre el control de armas y explosivos, destacó que con esta actuación “se ha impedido que las armas y municiones incautadas llegaran al mercado negro, evitando que pudieran ser utilizadas para la comisión de actos violentos”.

En este sentido, en la 'operación Breda', se realizaron varios registros domiciliarios en localidades de Navarra, Álava y Vizcaya, en las que se intervinieron una pistola detonadora modificada, una escopeta recortada, numerosas armas prohibidas y diversa munición detonadora transformada. También se localizaron diversas cantidades de droga, como marihuana, 'speed' y metanfetamina.

La operación se inició el pasado mes de julio, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento, a través de Correos, de un envío postal que contenía dos armas cortas y varios cartuchos metálicos. Tras la posterior apertura del paquete en sede judicial, se pudo confirmar que una de las armas era una pistola detonadora modificada para hacer fuego con munición metálica.

ARMAS Y DROGAS

Identificado el emisor del paquete postal, se pudo constatar que esta persona, además de cometer los delitos de tráfico de armas y tenencia ilícita de armas, tenía como actividad el tráfico de sustancias estupefacientes.

Una vez recopiladas suficientes evidencias y tras la completa identificación del remitente y receptor de las armas y los cartuchos, durante la mañana del pasado 16 de marzo se procedió a la detención de los presuntos autores del delito. Además, con la preceptiva orden judicial se realizaron varios registros domiciliarios en localidades de Navarra, Álava y Vizcaya.

Durante el transcurso de dichos registros se intervinieron diversas armas, como dos pistolas, una escopeta de cañones recortados, un arma artesanal de dos cañones paralelos y más de 300 cartuchos de distinto tipo. También se encontró maquinaria y herramientas para la transformación de armas y municiones tales como un taladro de columna, una radial, pistolas de termofusión, soldadores, etc.

En cuanto a la droga, en estos registros se encontró, entre otros elementos, medio kilogramo de cogollos de marihuana, una bolsa con 'speed', sustancias precursoras para la elaboración de metanfetamina y 14.500 euros en metálico.