Salud

Los pacientes alérgicos que usan mascarillas disminuyen el consumo de medicamentos de rescate y las visitas a urgencias

MADRID
SERVIMEDIA

El uso de mascarillas en pacientes alérgicos disminuye el consumo de medicamentos de rescate y las visitas a urgencias, según un estudio realizado por el Comité de Expertos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC).

El estudio analizó el poder filtrante de las mascarillas de protección ante la exposición al polen y los ácaros del polvo y concluyó que el uso de mascarillas homologadas, que reducen hasta un 80% las partículas de pólenes y polvo en el aire inhalado, es “una herramienta eficaz para reducir los síntomas alérgicos de los pacientes”, indican en un comunicado.

Los principales aeroalérgenos que afectan a la población son pólenes, ácaros del polvo, esporas de hongos y los epitelios de los animales. Asimismo, la utilización de las mascarillas en alérgicos estaría especialmente indicada para aquellos que residen en zonas donde se producen de forma habitual niveles muy elevados de pólenes, debido a la abundancia de determinadas plantas en esos lugares.

“Esto ocurre en grandes ciudades como Madrid, Barcelona, Zaragoza y Valladolid en los meses de marzo y abril por el plátano de sombra; en provincias como Jaén en mayo y junio por la polinización del olivo, y en Cáceres y Badajoz en las mismas fechas por las gramíneas. De hecho, los alérgicos a pólenes pueden necesitar usar mascarillas durante casi todo el año: en invierno por las cupresáceas (arizónica y ciprés), en primavera por el plátano de sombra, abedul, gramíneas, olivo y parietaria y por último en verano por la salsola y la parietaria”, puntualiza el presidente del Comité de Aerobiología de la SEAIC, el doctor Ángel Moral.

En este sentido, es tan importante el tipo de mascarilla que portan los pacientes alérgicos como su correcta colocación: debe cubrir tanto la nariz como la barbilla y evitar que las fosas nasales queden al descubierto, indica la organización.

“En el caso de que llevemos una mascarilla quirúrgica, debido a que en la crisis del Covid-19 puede ser difícil encontrar las protectoras, debemos procurar adaptar bien la parte superior de la mascarilla, que lleva un alambre flexible, al contorno de la nariz”, indica alergólogo y responsable de Comunicación de la SEAIC, el doctor Pedro Ojeda.

“Los pólenes también se depositan en la mucosa de los ojos, por lo que es necesario llevar también unas gafas de sol que nos cierren bien el contorno de la cuenca ocular”, añade.

En su comunicado recuerdan las “tradicionales recomendaciones” del especialista para disminuir la exposición a pólenes: evitar estar al aire libre, especialmente los días ventosos, viajar en el coche con las ventanillas subidas, revisar los filtros antipolen, evitar dejar mucho tiempo las ventanas de casa abiertas, entre otras.

(SERVIMEDIA)
29 Abr 2020
ARS/mjg