Cambio climático

Las grullas abandonan cada vez antes la península por el aumento de temperaturas y la escasez de agua

- Adelantan el abandono de las zonas de invernada a razón de un día antes cada tres años, según un estudio del CSIC

- La investigación concluye que el cambio climático “altera” las “rutinas migratorias” de las aves

Madrid
SERVIMEDIA

Las grullas cada vez abandonan antes la península ibérica por el aumento de las temperaturas y la escasez de agua como consecuencia del cambio climático que “altera” las “rutinas migratorias” de las aves.

Así lo concluye un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), según el cual la emergencia climática está alterando, en concreto, el patrón migratorio de la grulla común, que cada año abandona antes las zonas de invernada, según precisó este miércoles el CSIC a través de un comunicado.

El estudio, publicado en la revista ‘Avian Conservation and Ecology’ y en el que participan investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC), el Instituto Geológico y Minero de España y la Universidad Pública de Navarra, ha analizado las fechas de paso de las grullas en los últimos 50 años por la Laguna de Gallocanta (Aragón), una de las zonas de paso migratorio e invernada más importantes de Europa.

Los resultados muestran que el aumento de temperaturas y la reducción de la extensión de zonas encharcadas han “favorecido” que las grullas abandonen antes las zonas de invernada, a razón de un día cada tres años por lo que, desde que los investigadores tienen datos, las grullas han “anticipado” el abandono de su área de invernada “más de dos semanas”, según apuntó el investigador del MNCN Luis M. Bautista.

Para Bautista, este adelanto “coincide” con el “progresivo” aumento de la temperatura y la reducción de las zonas encharcadas que las grullas utilizan para pernoctar a salvo de depredadores.

A su juicio, la disminución del agua libre también ha afectado a los escasos arroyos y canales que proporcionaban a las grullas el agua dulce necesaria para beber durante su parada en el entorno de la laguna de Gallocanta, cuyas aguas son salobres.

Por su parte, el investigador del Instituto Geológico y Minero José María Orellana, precisó que el aumento de los índices de desertificación en el sur de Europa que prevén los modelos climáticos representa un “riesgo serio” que provocará una “alteración” del hábitat de invernada de esta y otras aves.

Con todo, alertó de que “más allá” de cómo afecta a las especies en sus rutinas migratorias, resulta “previsible” que esta alteración ocasione un “desequilibrio” en los ecosistemas que ocupan las grullas u otras aves migratorias”, concluyó.

El CSIC puntualizó que las grullas comunes son grandes aves migratorias de larga distancia que habitan la región ecológica Paleártica. Pasan la primavera, el verano y el principio del otoño en el norte de Europa y Asia, donde crían y el final del otoño y el invierno, cada vez durante menos tiempo, en el sur de esta región, esto es, en la península ibérica, África y sur de Asia.

(SERVIMEDIA)
20 Mayo 2020
MJR/mjg