Esta entidad indicó este martes en un comunicado que los comerciantes se encuentran con que "los escasos vehículos vendidos no se pueden rematricular en las jefaturas provinciales de Tráfico", aunque se han producido pocas operaciones entre marzo y mayo de este año, coincidiendo con el estado de alarma por la pandemia del Covid-19.

Ancove indicó que la mayoría de esas operaciones se debe a unidades que los comerciantes de vehículos adquirieron antes del confinamiento y que, en algunos casos, han conseguido vender "con mucho esfuerzo" a través de Internet.

"Sin embargo, ante la imposibilidad de poner los coches a nombre del nuevo comprador, se encuentran con que estas ventas peligran, pues algunos clientes, que no pueden usar sus vehículos, se quieren echar para atrás", añadió.

Por ello, Ancove indicó que el sector de la automoción necesita "con urgencia" que se reabran las jefaturas provinciales de Tráfico con las medidas de seguridad correspondientes a la situación sanitaria actual para poder tramitar los vehículos pendientes. "Con la vuelta de la actividad, aunque sea paulatina, se puede producir un colapso en los expedientes", agregó.

El presidente de Ancove, Elías Iglesias, ha recordado a Pere Navarro la importancia económica de reactivar lo antes posible la venta de vehículos de segunda mano, incluso con "el beneficio que implicaría para las arcas públicas por los ingresos fiscales que se pueden recuperar".