El informe ‘Conocimientos, actitudes y prácticas sobre las dietas milagro en la población española’, fue presentado este martes en la cuenta de Instagram de la Fundación Mapfre.

El estudio analiza los conocimientos, actitudes (positivas y negativas) y prácticas de 2.600 españoles, de entre 18 y 65 años, acerca de este tipo de dietas. El objetivo era entender mejor las razones por las que se recurre a ellas para resolver problemas de salud, como el exceso de peso. El estudio se realizó entre los meses de noviembre y diciembre de 2019.

Según las principales conclusiones del informe, solo el 3% de los que aseguran que sí funcionan indican que ello se debe principalmente a los resultados que obtienen en el corto plazo. Además, el 74% reconoce que este tipo de dietas son “un problema” para la salud y cerca del 80% de los encuestados reconoce que hacer una dieta milagro es “muy o bastante peligroso para la salud” y que “tiene efectos negativos” (83%).

En este sentido, los expertos ponen de manifiesto que las dietas milagro tienen efectos negativos sobre la salud. Entre ellos destacan: aumento del riesgo de daño hepático y renal y enfermedad cardiovascular; pérdida de masa muscular y masa ósea; trastornos de la conducta alimentaria y depresión. También destacan el llamado “efecto yo-yo”, que consiste en recuperar el peso perdido (o incluso más) una vez se abandona la dieta y el programa de pérdida de peso.

Por otro lado, el 27% de los encuestados considera que realizar una dieta planificada desde el centro de salud sería “más difícil” que seguir una dieta milagro. En este sentido, el 90% de los encuestados considera que si hubiera una mejor atención de nutrición y dietética en los centros públicos de salud, se reduciría el número de dietas milagro.

Además, las entidades resaltan que la mitad de los encuestados cree que “no hay diferencia entre hacer una dieta milagro (por su cuenta) a una que requiera prescripción del centro de salud”.

La encuesta también revela que siete de cada 10 encuestados no conoce exactamente qué es una dieta milagro y cerca del 80% considera que este tipo de dietas no tienen los resultados esperados a largo plazo.

PERFIL TIPO

Las mujeres, los jóvenes y el grupo de población con bajos ingresos y bajo nivel educativo son los colectivos que más realizan dietas milagro, según los resultados. Este último grupo son los que mayor frecuencia han seguido este tipo de dietas por recomendación de un comercial.

Las dietas milagro aparecen asociadas en la mayoría de casos a la compra de algún producto. Seis de cada 10 personas (56%) que han seguido una dieta milagro manifiestan haber adquirido productos concretos y considerados como necesarios para llevar a cabo la dieta. En este caso, de nuevo, las mujeres con menos ingresos y menor nivel educativo, representan el grupo de población que más consume estos productos para poder hacer este tipo de dieta.

RECOMENDACIONES

Los expertos advierten de la importancia de consultar al dietista-nutricionista o en su caso al médico de cabecera antes de iniciar un programa para perder peso con el fin de evaluar los riesgos asociados a un exceso de kilos. “Se trata de un elemento clave, que garantiza que la dieta cumple con los requisitos de salud necesarios, que evita riesgos y efectos secundarios y que proporciona un seguimiento profesional, un factor clave para incrementar el éxito del programa”, indican ambas entidades.

El dietista–nutricionista es el profesional sanitario “idóneo” para personalizar la dieta, ayudar a gestionar situaciones de ansiedad y estrés, muy vinculadas a un mayor consumo de alimentos, y proporcionar alternativas saludables