Marlaska hizo estas consideraciones después de que los portavoces de PP, Vox y Ciudadanos le pidieran en la Comisión de Interior de la Cámara Alta su renuncia por los ceses en la Benemérita, que estos partidos ligan al informe que este cuerpo de seguridad ha hecho sobre si hubo relación entre la marcha en Madrid del 8 de marzo por el Día de la Mujer y la propagación en la capital del Covid-19.

A este respecto, como ya hizo esta semana en el Pleno del Congreso, el titular de Interior dijo que las “supuestas purgas” de la que habla la oposición forman parte de un proceso de “redefinición” de los equipos directivos en el propio Ministerio y en el Instituto Armado. Añadió que para formar parte de estos equipos se demanda de los funcionarios “neutralidad”, “confianza” y “profesionalidad”.

Destacó que la directora de la Guardia Civil, María Gámez, “tiene derecho a formar sus equipos” y ya tenía “trabajado” el proceso de relevos entre los mandos del cuerpo antes del cese de Pérez de los Cobos y la posterior dimisión del teniente general Laurentino Ceña como director adjunto operativo (DAO).

“LIBRE DESIGNACIÓN”

En este sentido, el ministro señaló que no discute las “razones” que han llevado a Ceña a precipitar su jubilación, pero recordó que el DAO tenía previsto jubilarse el 23 de marzo, pero que se accedió a su petición de retrasar la fecha para estar presente en todos los actos del 175 aniversario de la Benemérita. Además, comentó que este nuevo plazo se amplió hasta el 2 de junio al desatarse la pandemia por el coronavirus.

Asimismo, defendió al principio de “libre designación” y que el PP critique el derecho a formar equipos cuando está en la oposición. Al mismo tiempo, reprochó a los populares que en su momento cambiase la ley para eliminar la figura del DAO en la Guardia Civil y prescindir así de quien ocupaba el cargo en su momento.

El responsable de Interior también negó que el cese de Pérez de los Cobos haya tenido que ver con en un intento de “injerencia” en la causa judicial que investiga la marcha del 8-M y la propagación del Covid-19. Según Marlaska, le están acusando de “delitos graves” sin fundamento para ello.