Ciencia

La altura de las montañas se debe a fuerzas tectónicas, no a la erosión

MADRID
SERVIMEDIA

El equilibrio de fuerzas en la corteza terrestre por movimientos tectónicos determina la altura de las montañas y no la erosión de las montañas, según un importante hallazgo para las ciencias de la tierra explicado en un estudio por tres investigadores alemanes.

Las cadenas montañosas más altas de la Tierra, como el Himalaya o los Andes, surgen a lo largo de los límites de placas convergentes; allí, dos placas tectónicas se mueven una hacia la otra y una de ellas se ve obligada a situarse debajo de la otra en el manto terrestre.

Durante este proceso de subducción, se producen repetidamente fuertes terremotos en la interfaz de la placa y a lo largo de millones de años se forman macizos montañosos en los bordes de los continentes.

Si la altura de las cadenas montañosas está determinada principalmente por procesos tectónicos en el interior de la Tierra o por procesos erosivos que esculpen la superficie de la Tierra es algo que se ha debatido durante mucho tiempo entre expertos en geociencias.

El nuevo estudio, dirigido por Armin Dielforder, del Centro de Investigación GFZ Alemán de Geociencias, indica que la erosión por ríos y glaciares no tiene una influencia significativa en la altura de las cadenas montañosas.

Junto con Onno Oncken, también del GFZ, y Ralf Hetzel, de la Universidad de Münster (Alemania), Dielforder, resolvió este antiguo debate analizando la fuerza de varios límites de placas y calculando las fuerzas que actúan a lo largo de las inferfaces de las placas.

Los investigadores llegaron a esta conclusión al calcular las fuerzas de diferentes límites de placas tectónicas en la Tierra. Emplearon datos de los que se derivan mediciones de flujo de calor en el subsuelo; el flujo calorífico en los límites de placas convergentes está, a su vez, influenciado por la energía de fricción en las interfaces de las placas continentales.

Podría imaginarse la formación de montañas usando un mantel. Si se coloca ambas manos debajo del mantel sobre la mesa y se empuja hacia arriba, éste se dobla y, al mismo tiempo, se desliza un poco sobre el dorso de las manos.

Los investigadores recopilaron datos mundiales de la literatura sobre fricción en el subsuelo de cadenas montañosas de diferentes alturas (Himalaya, Andes, Sumatra, Japón) y calcularon el estrés resultante y, por lo tanto, las fuerzas que conducen a la elevación de las montañas respectivas. De esta manera, demostraron que, en las cadenas montañosas activas, la fuerza en el límite de la placa y las fuerzas resultantes del peso y la altura de las montañas están en equilibrio.

Tal equilibrio de fuerzas existe en todos los macizos montañosos estudiados, aunque estén ubicados en diferentes zonas climáticas con tasas de erosión muy variables.

(SERVIMEDIA)
11 Jun 2020
MGR/pai