En una rueda de prensa tras visitar el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas junto al ministro de Sanidad, Salvador Illa, Ábalos aseguró que se están aplicando “las medidas necesarias para garantizar la seguridad de quienes nos visitan”, de acuerdo a lo aprobado por la Agencia Europea de Seguridad Aérea y bajo la supervisión del Centro de Prevención de Enfermedades Europeo, con unas directrices comunes a todo el espacio Schengen.

Así, el ministro de Transportes indicó que por el momento “se ha decidido la apertura de las fronteras dentro de este espacio” y que las llegadas de terceros países responden “a una lista limitada”, por lo que se trata de “vuelos justificados de acuerdo a expatriaciones y razones de trabajo o residencia”.

De esta manera, según explicaron los dos ministros, a partir de mañana los aeropuertos de la red de Aena recibirá vuelos nacionales y de países Schengen en los que se aplicará un protocolo con tres filtros de seguridad.

Por un lado, habrá un control de temperatura, otro control basado en las declaraciones responsables de los viajeros con "información sanitaria y que permite el seguimiento de la persona en España”, y un tercer filtro visual en caso de algún problema, y que finalmente podría suponer la atención por un médico y ser derivado a la red de sanidad de las comunidades autónomas.

Además, está prevista la ampliación de refuerzos de personal en esta primera fase y que el 1 de julio se volverá a incrementar para que se abra el turismo en general.