Así se desprende del primer 'Barómetro de percepción de la calidad del aire', elaborado por la Plataforma x Aire Limpio en colaboración con la Fundación Ecodes a partir de una encuesta realizada del 25 al 27 de mayo de este año (en pleno confinamiento por el coronavirus) a 2.020 ciudadanos de 18 a 65 años que viven en alguno de los 16 municipios españoles con más de 250.000 habitantes.

La Plataforma x Aire Limpio está integrada por representantes de los sectores energético y de movilidad, como Aelec, Anfac, EDP España, Enagás, Iberdrola y Sedigas, así como el Ayuntamiento de Bilbao.

El estudio, dado a conocer este martes, indica que la contaminación del aire es el principal problema medioambiental para la salud (según el 77,0% de los encuestados), por delante del cambio climático (68,3%), la calidad del agua (64,3%), las basuras y la gestión de residuos (58,3%) y el ruido (48,9%).

Los principales responsables de la mala calidad del aire en las ciudades son las fábricas (71,8%), el transporte privado (70,5%), la calefacción de combustibles fósiles (66,7%) y los productos químicos industriales, como pinturas o pesticidas (62,5%).

TRANSPORTE PÚBLICO

Más de la mitad de los encuestados (52,4%) cree que el transporte público de su ciudad no cubre sus necesidades de movilidad. Sin tener en cuenta el confinamiento por el coronavirus, el 53% se desplaza por transporte público al menos una vez a la semana, en tanto que el 61% utiliza el coche privado con esa frecuencia.

El 53,4% de las personas sondeadas indica que su ciudad cuenta con protocolos para altos periodos de contaminación y estos son puntuados con una nota de 6,19 sobre 10.

Los protocolos que se mencionan en primer lugar son las restricciones de tráfico y la reducción de los límites de velocidad, seguidos de las limitaciones de acceso al centro urbano. Entre otras medidas a disposición de los ayuntamientos, destacan las zonas peatonales, valoradas con un 7,55 sobre 10 y el 60% de los encuestados otorgándoles la máxima puntuación.

Finalmente, si bien el acceso a la información sobre la contaminación por parte de los ciudadanos está bastante extendido, el barómetro apunta la existencia de un margen de mejora en su frecuencia. Así, sólo un 4% se informa habitualmente, mientras que un 25% lo hace en ocasiones. La televisión (15,4%) e Internet (13,6%) son los medios principales para aquellos que se informan.

Según la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), en torno al 90% de la población europea vive en zonas donde se rebasan los valores límite de calidad del aire o se incumplan las guías de protección a la salud fijadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El ozono, el dióxido de nitrógeno y las partículas en suspensión son los tres contaminantes con mayor incidencia negativa sobre la salud.