La solicitud del PP contó con el respaldo de Vox y Ciudadanos y con el rechazo de PSOE, Unidas Podemos y PNV un día después de que la Comisión Europea haya propuesto al Consejo aportar 21.300 millones de euros a España, con cargo al fondo de desempleo SURE, para pagar los ERTE puestos en marcha por el coronavirus, en sintonía con la petición que hizo el Gobierno de Pedro Sánchez.

De este modo, España será tras Italia (27.400 millones) el segundo país más beneficiado de los 17 que han pedido ayudas de este fondo, que fue anunciado en abril y está dotado con 100.000 millones.

En total, Bruselas ya ha dado luz verde a financiación a 15 países por valor de 81.400 millones y está estudiando las solicitudes de Portugal y Hungría.

El diputado popular Mario Garcés conminó a Sánchez a pasar de “la estética del aplauso a la estética del bañador” con el fin de “dejar de engañar” y “dar información cabal, veraz y adecuada sobre las negociaciones” que ha mantenido con las instituciones comunitarias.

Garcés, tras constatar que el déficit se desplomará este año en 123.000 millones de euros, según el Banco de España, y la caída de los ingresos y el aumento de los gastos, se preguntó “cómo van a cubrir esa brecha”: “¿creando nuevas figuras impositivas recurriendo al MEDE?”, puesto que la primera aportación del fondo de recuperación de la UE prevista para el año que viene “no cubrirán ni un tercio del déficit”.

"BUENA NOTICIA"

Desde Coalición Canaria, Ana Oramas rechazó la comparecencia de Sánchez y mostró su inclinación a que lo haga la vicepresidenta y titular de Economía, Nadia Calviño. Luego de considerar una “buena noticia” que España tenga financiación para los ERTE, rechazó esta comparecencia porque sólo serviría para que el jefe del Ejecutivo “sacara pecho”.

Desde el PNV, Mikel Legarda (PNV) también rechazó esta posibilidad por ser suficiente que dé cuenta sobre este asunto Calviño en la Comisión de Economía de la Cámara Baja.

Guillermo Díaz, de Ciudadanos, apoyó la comparecencia de Sánchez, a quien instó a “asumir la realidad” de las consecuencias de la pandemia y a “usar con diligencia” los fondos que España recibirá de la UE para “evitar que sean Rufián, Otegi o Iglesias quienes lo repartan y se malversen en causas independentistas, filoetarras o en casas podemiles en México”.

A su vez, Antón Gómez Reino, de Unidas Podemos, rechazó la petición del PP, a quien acusó de haber hecho lo imposible por “hacer descarrilar” el acuerdo y lamentó que los populares anhelen la puesta en marcha de “medidas lesivas para el interés general”.

Desde Vox, José María Sánchez apoyó la comparecencia de Sánchez, a pesar de considerarle “incapaz” de explicar el fondo SURE por ser un “aventurero ayuno de cualquier conocimiento, incluso en una materia de la que dice que se ha formado, con un grupo de bolcheviques presos de éste que han tomado como rehenes a los españoles”

Por último, Pedro Casares Montañón, del PSOE, rechazó la petición del PP, a quien acusó de “poner en riesgo la credibilidad de España en el peor momento de nuestra historia” a pesar de que “Europa ha llegado pronto, tiempo y bien”.