En declaraciones a Servimedia, Laborda alertó de la posibilidad de que un gobierno comandado por el GIL pueda representar "un problema internacional", en particular en lo concerniente a las relaciones entre España y Marruecos.

Laborda se refirió a la "gravedad" de las prpuestas electorales de GIL, "como sus coqueteos con estamentos militares, un cierto componente xenófobo o el uso que ha hecho de la policía". "Todo eso es muy sensible y hay que evitar trasladar a Ceuta y Melilla la política autoritaria del 'ordeno y mando' de Jesús Gil y Gil", agregó.

El dirigente socialista concluyó: "Las instituciones y los partidos políticos serios estamos llamados a cooperar y colaborar, porque no vaya a ser que de gracia en gracia entremos en una espiral de esperpento y de tensin".