Religión

El Papa llama ante la ONU a la cooperación: "La pandemia ha mostrado que no podemos vivir uno contra el otro"

- Pide que se garantice el acceso a las vacunas contra el coronavirus, clama contra la 'cultura del descarte' e insiste en el cuidado de la 'casa común'

MADRID
SERVIMEDIA

El papa Francisco aseguró este viernes ante la Asamblea General de la ONU que "la pandemia nos ha mostrado que no podemos vivir sin el otro, o peor aún, uno contra el otro", por lo que llamó a fomentar la cooperación entre Estados y el multilateralismo.

Así lo aseguró en el videomensaje con el que participó en la 75º asamblea de la organización internacional, que se celebra en Nueva York entre el 21 y el 29 de septiembre.

En su discurso, el Papa recalcó que "de una crisis no se sale igual: o salimos mejores o salimos peores". "Por ello, en esta coyuntura crítica, nuestro deber es repensar el futuro de nuestra casa común y proyecto común. Es una tarea compleja, que requiere honestidad y coherencia en el diálogo, a fin de mejorar el multilateralismo y la cooperación entre los Estados. Esta crisis subraya aún más los límites de nuestra autosuficiencia y común fragilidad y nos plantea explicitarnos claramente cómo queremos salir: mejores o peores".

Asimismo subrayó que el origen de la ONU fue "para unir a las naciones, para acercarlas, como un puente entre los pueblos". "Usémoslo para transformar el desafío que enfrentamos en una oportunidad para construir juntos, una vez más, el futuro que queremos", apeló.

En su opinión, esto requiere un cambio de dirección, "y para esto ya tenemos los recursos, los medios culturales, tecnológicos y tenemos la conciencia social". "Sin embargo, este cambio necesita un marco ético más fuerte, capaz de superar la tan difundida e inconscientemente consolidada 'cultura del descarte'", lamentó.

Francisco definió que esa cultura tiene su origen en "una gran falta de respeto por la dignidad humana, una promoción ideológica con visiones reduccionistas de la persona, una negación de la universalidad de sus derechos fundamentales y un deseo de poder y de control absolutos que domina la sociedad moderna de hoy. Digámoslo por su nombre". "Esto también es un atentado contra la humanidad", protestó.

La opción opuesta al multilateralismo, remarco, "da preferencia a las actitudes de autosuficiencia, nacionalismo, proteccionismo, individualismo y aislamiento, dejando afuera los más pobres, los más vulnerables, los habitantes de las periferias existenciales". "Y ciertamente será perjudicial para la entera comunidad, causando autolesiones a todos. Y esto no debe prevalecer", clamó.

VACUNAS COVID-19

El líder de los católicos llamó también a "admitir honestamente" la "poca capacidad" de la comunidad internacional para cumplir sus promesas y no caer en un "nominalismo delcaracionista" con "efecto tranquilizador de las conciencias".

"La pandemia ha puesto de relieve la urgente necesidad de promover la salud pública y de realizar el derecho de toda persona a la atención médica básica", remarcó, insistiendo "a los responsables políticos y al sector privado a que tomen las medidas adecuadas para garantizar el acceso a las vacunas contra el Covid-19 y a las tecnologías esenciales necesarias para atender a los enfermos". "Y si hay que privilegiar a alguien, que sea al más pobre, al más vulnerable, a aquel que normalmente queda discriminado por no tener poder ni recursos económicos", pidió.

En su discurso, el pontífice se refirió tambien a la "peligrosa situación" en la Amazonía y la vulnerabilidad de mujeres y niños, avisando a la ONU que "la Santa Sede seguirá desempeñando su papel", especialmente en el cuidado de la 'casa común'.

(SERVIMEDIA)
25 Sep 2020
AHP/mjg