Coronavirus

Las personas en crisis alimentaria se duplicarán en 2020 a causa del coronavirus, hasta alcanzar los 265 millones

- Unos 10.000 niños más morirán por desnutrición al mes

MADRID
SERVIMEDIA

El número de personas en situación de crisis alimentaria casi se duplicará en 2020 por el impacto de la Covid-19, hasta alcanzar los 265 millones de personas a finales de año. Las estimaciones a principios de 2020 hablaban de 135 millones.

Así lo advirtieron este jueves en una rueda de prensa virtual el responsable de Salud y Nutrición de Acción contra el Hambre, Antonio Vargas, y el director de Incidencia Política de esta ONG, Manuel Sánchez, en la presentación de sus últimos datos sobre la situación del hambre en el mundo y en España.

Según sus predicciones, el porcentaje de niños y niñas que podrían morir cada mes por desnutrición aumentará un 14% como consecuencia de la pandemia. Esto “se traduciría en 10.000 muertes infantiles más por mes”, indicó Vargas. En su intervención, destacó que el “ataque a la alimentación se produce desde dos flancos: economía y salud”.

El confinamiento de casi la mitad de la población mundial “ha puesto en jaque a 2.000 millones de trabajadores informales que dependen de su actividad diaria para ganarse el arroz o el pan”, y aseveró que en Perú, en India o en Filipinas “encerrar las ciudades y los mercados fue una condena para cientos de miles de personas”.

Asimismo, apuntó que el cierre de fronteras y la ruptura de los mercados han provocado una hiperinflación que en muchos países está llevando a la población a pasar hambre en mercados que antes sí estaban abastecidos. A esto hay que agregar los efectos directos de la pandemia en la salud.

En su opinión, “el colapso de sistemas sanitarios con la enfermedad o simplemente el miedo de la población a acercarse a lugares que podían estar repletos de carga viral ha dejado sin atender a otras enfermedades”. Esto resulta “especialmente grave en el caso del tratamiento de la desnutrición”, prosiguió, así como en la suspensión de los programas de prevención.

SITUACIÓN EN ESPAÑA

Por otro lado, la ONG subrayó su preocupación por la situación alimentaria también en España. Los profesionales de Acción contra el Hambre que trabajan por la inclusión sociolaboral de personas desempleadas y en situación de vulnerabilidad en diez comunidades autónomas han alertado a su vez de un cambio de patrón en la dieta de las familias, que han perdido su empleo o han visto drásticamente reducidos sus ingresos.

Según Vargas, “compran menos pescado, carne o productos frescos y hacen más frecuente el consumo de ultraprocesados, a la venta a precios más baratos”. Resaltó que “la relación entre desempleo y una mala alimentación es bidireccional, no solo come peor quien ve reducidos sus ingresos, sino que el deterioro de su estado de salud por un cambio de dieta reduce sus posibilidades de empleo”.

Por este motivo, Acción contra el Hambre está integrando una nueva línea de trabajo en sus programas de empleo en España para incorporar buenos hábitos nutricionales y saludables, como factor clave a fin de mejorar la empleabilidad de los usuarios.

Manuel Sánchez reclamó “un aumento extraordinario de recursos” para hacer frente a esta situación, que “va más allá de la crisis sanitaria”, pues “no se puede hacer más con menos”. “Tampoco debemos olvidar otras crisis anteriores, como la de Siria o Yemen”, y propuso que “los trabajadores humanitarios sean considerados trabajadores esenciales”, a fin de asegurar su libertad de movimientos y la continuidad de su labor.

(SERVIMEDIA)
15 Oct 2020
AGQ/gja