Ábalos respondió en el Pleno de la Cámara Baja a una interpelación urgente de la diputada de la CUP (Grupo Mixto) Mireia Vehí, sobre la regulación de los precios del alquiler en una nueva ley de vivienda.

El ministro dijo que las dos formaciones socias del Gobierno de coalición han acordado que la contención de los arrendamientos en zonas con mercados “tensionados” se haga en el marco de la nueva ley, que está en trámite de información previa, porque se trata de “una medida que afecta al derecho a la propiedad privada” y debe hacerse blindándola “con las garantías de una ley”, “no vale” recurrir a un decreto para aprobarla ya por urgencia, como le reclamó la diputada independentista.

Además, Ábalos alegó para esperar a la nueva ley que el mercado está actualmente muy afectado por el impacto de la crisis sanitaria y es “imposible tener un diagnóstico” certero de cómo está realmente el alquiler.

MÁXIMO CONSENSO

El responsable de Vivienda confirmó que el proyecto de ley será aprobado por el Consejo de Ministros en un plazo máximo de tres meses para su remisión a las Cortes antes de 4 meses.

Ábalos se comprometió a “oir a todos los agentes y organizaciones sociales, Administraciones públicas y al sector privado” antes de la aprobación del proyecto, porque en el ánimo del Ejecutivo, subrayó, está sacar adelante una ley “lo más consensuada posible”. Para ello, se crearán grupos de trabajo que se encargarán de debatir el nuevo texto normativo.

Sobre la petición que le hizo la diputada de la CUP para que se paralicen todos los desahucios, dijo que estos fueron suspendidos con el estado de alarma y se prorrogó la medida, pero es preciso que exista un contrato para residir en la vivienda.