Según informó el Ejército del Aire, el Centro Logístico de Armamento y Experimentación (Claex) de la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid) está liderando dicha campaña con un despliegue de 19 efectivos del que también forman parte personal de apoyo del Ala 12 y 47 Grupo de Fuerzas Aéreas.

Al despliegue humano se suman tres F-18: una aeronave de ensayos, otra de seguimiento y otra de reserva, preparada para actuar en caso de fallos en el mantenimiento en alguna de las dos anteriores.

Esta campaña tiene como objetivo “garantizar la correcta compatibilidad entre la aeronave y el misil modificado”, para lo cual se llevan a cabo ensayos de pruebas en tierra de comunicaciones entre ambos, vuelos de familiarización de la tripulación con el área de ensayos y procedimientos locales y un “vuelo cautivo” en el que se realiza un lanzamiento simulado del misil.

Este despliegue de medios humanos y aéreos del Ejército del Aire tiene lugar después de haber efectuado la MLU, un proceso que modifica el misil original en lo referido a la integración de una nueva antena y de un receptor GPS con capacidad mejorada frente a perturbaciones, sistemas de filtrado, actualización del ‘software’ de misil y algoritmos de navegación y del programa instalado en el ordenador de procesamiento de imagen.