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Casi la mitad de las empresas cotizadas no pagará 'bonus' a cúpulas y plantillas por incumplimiento de objetivos con el Covid-19

-KPMG augura que en 2021 “la tónica será la máxima prudencia” en materia retributiva por la situación y la demanda de los ‘proxies advisors’

MADRID
SERVIMEDIA

La situación creada por el Covid-19 deja un escenario donde “lo más probable es que 1 de cada 2 compañías no pague variable a casi todos los niveles, al no haberse alcanzado los objetivos de negocio por la pandemia”, según la directora del área de Compensación General, de Consejeros y de Directivos de KPMG Abogados, Mónica San Nicolás.

Sus proyecciones las realiza en base al informe 'Remuneración de los consejeros del Ibex 35' elaborado por KPMG Abogados, donde revela que en 11 de las 35 compañías que integra dicho selectivo “ya se han anunciado ajustes a la baja a nivel de Consejeros” por “un importe aproximado de unos 17 millones de euros”, según detalla San Nicolás a Servimedia.

Son estimaciones muy preliminares y en base a notificaciones efectuadas por las compañías, al no haberse publicado aún los informes anuales donde rinden cuenta de sus políticas retributivas. Aún así, el ajuste ya anunciado por esas 11 empresas equivale a un descenso del 5,4% respecto a la remuneración total devengada en 2019 por todas las empresas del Ibex.

La diferencia en la aplicación de estas estrategias “dependerá” del dispar impacto de la crisis provocada por las restricciones para contener la pandemia. “Distribución, alimentación, energía, telecomunicaciones, servicios financieros pueden estar viviendo verdaderos picos de actividad, mientras que transporte, hostelería, hoteles y otros sectores caídas muy significativas”, recuerda.

“Si ha habido ajustes de empleo, cancelaciones de dividendo o la empresa ha sido apoyada financieramente por el Estado, se recomienda no pagar variables y ajustar las remuneraciones”, agrega, concluyendo que, por eso, cada empresa tendrá que tomar “las medidas que mejor se ajusten a su situación”.

Algo que no impide, sin embargo, que el sector bancario vaya en cabeza de alguna manera por las restricciones a las remuneraciones variables que instauró para el 2020 el Banco Central Europeo (BCE), aunque recientemente las ha flexibilizado ya pensado en el 2021, siempre que las entidades cuenten con buenas huchas de solvencia.

“El sector financiero es el que más comunicaciones de ajuste a la baja de remuneraciones ha realizado para 2020 siguiendo esta instrucción: de las 11 compañías anteriores aproximadamente la mitad son entidades financieras”, explica, detallando que los ajustes varían, siendo en algunos casos para presidentes y consejeros delegados, o para toda la cúpula.

TRANSPARENCIA Y MÁS CLÁUSULAS DE DEVOLUCION

A futuro y ya en clave 2021, la experta de KPMG expone que “lo que todos los agentes están pidiendo es que cuando sea necesario hacer ajustes éstos se produzcan a todos los niveles de la compañía: desde el Consejo hasta abajo”. “Para 2021 la tónica será la de máxima prudencia, y el reto será fijar los objetivos del año y decidir qué hacer con los incentivos a largo plazo cuando se deba lanzar alguno”, agrega.

Uno de los actores que más vigilan las prácticas retributivas razonables son los llamados ‘proxies advisors’ o asesores de votos para los inversores institucionales cuya participación en las Juntas de accionistas que deben, en última instancia, aprobar o no las políticas retributivas de las cúpulas de las empresas, están ganando protagonismo de forma creciente.

Otro informe de KPMG revela que algunos de estos ‘proxies’ han emitido ya en noviembre sus recomendaciones sobre qué esperan en el 2021, como el Institutional Shareholder Services (ISS), de fuerte presencia en Europa, o The Investment Asociation de Reino Unido, y confían en que las compañías expliquen sus políticas retributivas con todo lujo de detalle y suficiente tiempo para poder evaluarlas.

La asociación británica de inversores no espera ajustes en retribuciones variables a corto plazo por la Covid, pero tampoco que en 2021 se intenten compensar las pérdidas del 2020 y en cuanto a los pagos variables a largo plazo abogan por no ir a máximos en su fijación y explicarlos muy bien para evitar ganancias inesperadas en los mercados el próximo año.

De forma adicional, abogan por establecer más cláusulas ‘malus’ y ‘clawback’, que son aquellas donde se pueden reclamar las retribuciones variables abonadas al consejero o directivo si afloran a posteriori resultados adversos o perjudiciales, o riesgos asumidos sin conocimiento de la sociedad, y por mala praxis.

En el caso España y, según relata la experta de KPMG, la rendición de cuentas con mayor profusión vendrá obligada con la aprobación de la Ley de Fomento de la Implicación de los accionistas a largo plazo.

Entre otros aspectos exigirá a las empresas explicar en su Informe Anual de Remuneraciones, no solo sus políticas retributivas, sino también cómo contribuyen al rendimiento a largo plazo y sostenible de la empresa, cómo han fijado las remuneraciones y cómo han tenido en cuenta el voto de los accionistas al respecto.

(SERVIMEDIA)
03 Ene 2021
ECR/man