El tema, con tintes de pop rock independiente, es el segundo single del disco ‘Estado de alarma’, que constará de 12 sencillos que el grupo espera presentar en marzo o abril, y fue escrito al inicio de la pandemia, cuando el especialista llegó a trabajar durante cuatro meses en la UCI Covid del centro en un momento en que, recordó, “todos los médicos eran médicos de Covid”.

Tras mostrar su “preocupación” porque la curva “está creciendo de manera preocupante” y por el hecho de que el servicio de anestesia del hospital ya está asumiendo pacientes Covid en su unidad de críticos ya que la UCI médica está “llena”, algo que no pasaba desde la primera ola, Herrero rememoró cómo, durante el confinamiento, ese trabajo resultó “muy inspirador”.

“Por todo lo que vi, cómo todo el mundo trabajó dejándose la piel y las experiencias tan intensas que estábamos viviendo”, agregó, para, a continuación, asegurar que tuvo entonces “una etapa bastante creativa” que arrancó con el “himno” titulado ‘La vida en los balcones’, que supuso para él “como abrir una puerta de creatividad”, y continuó con el primer single de su nuevo trabajo, ‘Por el camino’.

La nueva canción, publicada el viernes, muestra una historia que, según su criterio, “podía haber pasado en el confinamiento a cualquiera” y afirma que surgió “cuando ya empezaron a terminar los aplausos” e “inevitablemente” transmite sus sentimientos en ese momento.

Herrero, que acaba de vacunarse, se contagió del virus y, aunque él fue asintomático, vivió de cerca algunos casos que lo pasaron “bastante mal” y ahora recuerda aquellos meses en los que se iban “cubriendo unos compañeros a otros” agradeciendo la buena organización de su servicio y consciente de que es “muy difícil trabajar a esa intensidad todos los días sin descanso”.

Para “evadirse”, muchos días cogía su guitarra cuando regresaba del hospital “para pensar en otra cosa” y dejar aparcada su “frustración por no poder llegar a todo”. “Porque no teníamos los medios suficientes y no nos sentíamos escuchados por parte de algunas autoridades, que mostraron poca empatía”, lamentó, para reconocer que en su ánimo también influyó “que no se veía una luz al final del túnel” y todo ello “va minando”.

Y todo ello, en medio de una batalla contra un virus “totalmente desconocido y que llegó de golpe” pero que en estos meses los sanitarios han “aprendido a combatir”, según defendió, convencido de que en la actualidad “se trata mucho mejor, hemos aprendido a elaborar mejores protocolos, a tener mejores fármacos, a tener más organizados los algoritmos de tratamiento y diagnóstico, se hacen muchos más test y la gente va mucho antes al hospital”.

No obstante, hizo hincapié en que todavía “sigue siendo una enfermedad de riesgo” ante la que los sanitarios se enfrentan “con respeto”, pero no con miedo de infectarse, aunque sí de contagiar a sus allegados más vulnerables.

Con respecto al apoyo y el calor que recibieron estos profesionales durante el confinamiento, aseguró que la población respondió a su esfuerzo “de manera admirable” y dijo sentir que sigue “al lado y apoyando a todos los profesionales que hay luchando contra el virus, aunque ya no haya aplausos”.

En este punto, urgió a “concienciarse de que esto no ha acabado para nada y va para largo” y “pueden seguir existiendo picos preocupantes en determinadas zonas”, por lo que llamó a “seguir siendo responsables” y a entender que “no tenemos 'plan B' a la vacuna, salvo el confinamiento total”.

“Esta es una situación de alarma mundial y hay que tener un poquito de fe en la vacunación porque, si no eliges vacunarte, la otra opción que te queda es seguir como estás y creo que nadie quiere seguir como estamos”, advirtió, para, a continuación, señalar que vacunarse “es de sentido común, es por el bien propio y el bien común, es para cuidarnos todos”.

FUTURO

Mientras continúa su batalla contra el nuevo coronavirus, Lolo Herrero y su banda esperan poder celebrar su concierto de presentación entre abril y mayo en un evento con un aforo “bastante amplio, siempre y cuando se cumpla toda la seguridad” y con el objetivo de “celebrar el principio del fin” de esta crisis sanitaria.

El proceso creativo de este disco, que fue grabado tras el confinamiento y se encuentra en proceso de mezcla, se está grabando en un documental que también da fe de los cinco conciertos que ha protagonizado el grupo estos meses y del momento en el que ha sido gestado, para “tener un bonito recuerdo de esta etapa”, que, para él, “no ha sido fácil” y también ha supuesto un “golpe horroroso” para su otro mundo, el de la cultura.

“La cultura es importante, es algo que hay que cuidar igual que la sanidad o la educación porque es algo fundamental para el desarrollo de un país”, resolvió.