La Fundación Renovables aboga por elevar al 30% el peso de estas energías en 2020

MADRID
SERVIMEDIA

La Fundación Renovables criticó este martes la contradicción que supone que en el Balance Energético 2010 (presentado recientemente por el Ministerio de Industria y el sector energético) se reconozcan los beneficios de las renovables pero, a la vez, se ponga el freno a sus objetivos. Esta organización aboga por elevar el consumo final de estas energías al 30% para el año 2020.

Para esta organización, el hecho de que las renovables fueran en 2010 la primera fuente de generación eléctrica (con el 32,6% del total según el citado documento) confirma que en España se está produciendo un cambio de modelo energético que se refleja en un constante incremento de la participación de las energías renovables que desplazan a las fuentes convencionales como los ciclos combinados de gas, la nuclear o el carbón.

La fundación destaca, entre los principales beneficios de una mayor participación de renovables, la reducción de las emisiones de CO2 un 20% y la disminución de la dependencia energética en tres puntos.

A su juicio, las renovables son el instrumento más eficaz para reducir las importaciones de gas y petróleo y para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones contaminantes.

Como aspecto negativo la fundación destaca que, según el Balance Energético, la intensidad energética se ha incrementado un 2,4%. Esto significa que el consumo de energía sigue desacoplado con respecto al crecimiento del PIB, "debido a una política regulatoria que no presta atención ninguna al ahorro y unas compañías distribuidoras que siguen compitiendo exclusivamente por la mayor facturación y consumo de sus clientes y no por el ahorro. La gestión de la demanda está desaparecida en la política energética", señaló.

La fundación lamenta además que "los ataques a las renovables no han dejado de agravarse hasta el día de hoy, a pesar de que la regulación ha ido recortando las ayudas y los objetivos a las renovables y, de la misma manera, incrementando las subvenciones y los objetivos al carbón, a los ciclos combinados y más recientemente a la nuclear".

Asimismo, esta organización llama la atención sobre la contradicción que supone que en el balance, a la vez que se reconocen los beneficios de las renovables, se pone el freno a sus objetivos que se rebajan del 22,7% de consumo final en 2020, como se había comunicado a la Comisión Europea, al 20,8% aprobado en el Congreso de los Diputados.

"Lo grave de este freno es que se deja a todas las tecnologías solares, a la eólica marina, la biomasa y la geotermia, reducidas a la mínima expresión y con un crecimiento tendencial y casi vegetativo hasta 2020 y una incertidumbre regulatoria total a partir de 2012", dijo la Fundación Renovables.

Desde su punto de vista, el cambio de modelo energético ha de apoyarse en objetivos de renovables, de ahorro de energía y de reducción de emisiones mucho más elevados.

"Del 20+20+20", indica, "se debe pasar al 30+30+30 en el 2020 si de verdad queremos alcanzar el objetivo coherente de una economía moderna con una política energética moderna. Los países más avanzados y con los que compite nuestra economía, están duplicando con la crisis los objetivos de sus tecnologías renovables. Frenarlos aquí supone una incoherencia que en términos de costes económicos nos acerca a una futura crisis energética que sólo se puede evitar abandonando la dependencia de los combustibles fósiles y de la energía nuclear".

(SERVIMEDIA)
05 Abr 2011
CCB/caa