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La Fiscalía de Murcia pide la lista de los 400 trabajadores de la Consejería de Salud que se vacunaron sin que les tocara

MADRID
SERVIMEDIA

La Fiscalía Superior de Murcia ha decidido abrir diligencias de investigación para aclarar si hubo alguna irregularidad con repercusión penal en la actuación de los cargos públicos que se saltaron el protocolo marcado por el Ministerio de Sanidad y se vacunaron sin estar entre los grupos preferentes. Para empezar ha pedido el listado completo de 400 trabajadores de ls Consejería de Salud que recibieron la primera dosis sin que les tocara.

La investigación se abre como consecuencia de las denuncias presentadas por Unidas Podemos y el PSOE. Hasta ahora, el escándalo le ha costado el cargo al consejero de Salud, Manuel Villegas, y son centenares los responsables públicos salpicados. En concreto, el escrito presentado por los socialistas pide que se investigue la vacunación de Villegas y de 400 trabajadores de la consejería.

Según la estrategia aprobada por el Ministerio de Sanidad, durante la primera fase de la vacunación se debe inmunizar a mayores en residencias de ancianos, el personal que los atiende, el personal sanitario de primera línea y personal sociosanitario, así como los grandes dependientes.

La denuncia de los socialista explicaba que la Consejería de Salud “se han saltado arbitrariamente, de una manera injusta y grosera” lo establecido en el protocolo de vacunación establecido por el Ministerio de Sanidad y por la propia Consejería de Salud del Gobierno Regional.

Los socialistas defienden que se trata de "trato de favor con el personal no asistencial de la Consejería de Salud y del Servicio Murciano de Salud", ya que "se crea una situación de privilegio con estos trabajadores, altos cargos y el propio consejero que quizá no puede pasar desapercibido para la justicia".

Pide que se depuren responsabilidades, porque entienden que "se tuvo que dar orden clara y directa de que se suministrara la vacuna al personal no asistencial de la consejería, lo que podría conllevar la posible comisión de un delito de prevaricación o un delito de malversación de caudales públicos al haber sido administrada una vacuna propiedad de la administración a quien no tiene derecho a ella según los protocolos establecidos". La actuación podría constituir un delito de prevaricación.

(SERVIMEDIA)
26 Ene 2021
SGR/gja