Economía

Hernández de Cos avisa de que los países que salen de la crisis con empresas muy endeudadas “acaban generando menos empleo”

MADRID
SERVIMEDIA

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, alertó este martes de que aquellos países que salen de la crisis con su sector empresarial muy endeudado “acaban invirtiendo menos durante los años posteriores y generando, por tanto, menos empleo”.

Su aviso lo efectuó durante una nueva jornada de las conferencias 'Salvemos el turismo' organizadas por Hotusa y como conclusión de lo necesario que resulta “el cambio en los énfasis” en las medidas de apoyo desplegadas por el Gobierno para ayudar a empresas y autónomos a encarar la crisis provocada por la pandemia.

Según reconoció, las medidas desplegadas con instrumentos como los avales del ICO o los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) se han demostrado útiles, preservando el tejido empresarial “más o menos intacto” después de nueve meses de restricciones y caída de la actividad, aunque se “hayan producido algunas pérdidas”.

Sin embargo, avisó de que las empresas continúan teniendo perspectivas más bajas de actividad y se encuentran ahora más endeudadas, de forma que “las recetas, los instrumentos, no pueden seguir siendo los mismos” porque puede estar ya en juego la viabilidad.

“No tiene sentido de que sigamos endeudando todavía más a esas empresas”, afirmó, apostando porque comiencen a cobrar “más peso” otras herramientas como las capitalizaciones, las subvenciones directas y los procesos de reestructuración de empresas viables.

En apoyo de estas estrategias esgrimió dos razones: para evitar extinciones de compañías y para impulsar el crecimiento de la economía a un ritmo superior al que lo haría con empresas que arrastren fuertes deudas.

Se trata, dijo, de “eliminar los riesgos de cola”, ya que tenemos un colectivo de empresas con perspectivas de actividad más bajas y donde el problema de liquidez se ha convertido en uno de solvencia, lo que hace que “puedan estar en riesgo de desaparecer”. “Evitar ese escenario es absolutamente fundamental”, conminó.

Asumiendo la hipótesis de un cambio de escenario hacia una menor presión sobre su negocio y actividad, explicó que “tampoco hay que minusvalorar el papel que pueden ejercer esos instrumentos para, incluso en un contexto más optimista, tener una recuperación más rápida”.

Hernández de Cos reconoció que es una tarea difícil de gestionar, ya que obliga a hacer también una discriminación por tipo de empresas con problemas “que necesitan remedios distintos”.

Por un lado, indicó que habrá empresas o sectores “que no pensamos que su demanda estructural va a cambiar como consecuencia de la crisis, pero que sí se encuentran muy afectadas por la situación” actualmente y están muy endeudadas, de forma que “puede que acaben desapareciendo o su recuperación posterior puede ser lenta”. Aquí aconsejó aplicar una reestructuración de deuda, recapitalización o subvención directa.

El segundo caso sería el de una compañía, también muy endeudada y que encara una caída estructural de su demanda o negocio del 10-15%, que con un ajuste interno resulte perfectamente viable. A título de ejemplo, indicó aquellas que se enfrentarán al simple cambio del patrón de consumo que ha traído el teletrabajo. “Es evidente que hay que permitirle a esa empresa ese ajuste estructural”, vía los mecanismos existente laborales, instó.

La tercera hipótesis serían compañías con dificultades y elevada deuda y que acabarán siendo compañías no viables, que aconsejó intentar identificar para dejarlas caer. “No tiene ningún sentido, en este tercer caso, mantener un apoyo público permanente en empresas zombis. No solo porque es tirar el dinero sino porque tiene consecuencias sobre la economía”, alertó, en alusión al riesgo de que una actuación así provoque “recuperaciones más lentas”.

(SERVIMEDIA)
26 Ene 2021
ECR/clc