Su pago estuvo congelado el pasado año por las recomendaciones de los reguladores y, de manera específica, de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones ante la incertidumbre ocasionada por la crisis desatada con la pandemia.

Cesce justificó su abono ahora tras un “análisis exhaustivo y reflexivo de la situación de la entidad”, y entiende que “no compromete ni la solvencia futura de la entidad ni la protección de los intereses de los tomadores de seguros y asegurados”.

Además, explicó que lo hará en el contexto de las recomendaciones actuales de los supervisores en esta materia y “sin objeciones por parte de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones”.

La Junta de Accionistas ha aprobado además incluir en sus Estatutos Sociales el nuevo mandato que asume la compañía para cubrir, por cuenta del Estado, los riesgos de insolvencia derivados de la adquisición, a medio y largo plazo, de energía eléctrica por parte de Consumidores Electrointensivos.

La nueva competencia se deriva del real decreto ley aprobado por el Gobierno el pasado 26 de junio y donde se creó el Fondo Español de Reserva para Garantías de Entidades Electrointensivas (Fergei). La dotación inicial del fondo es de 200 millones de euros y se prevé una cobertura máxima de 600 millones en los tres primeros ejercicios. Se designó a Cesce como agente gestor y al Consorcio de Compensación de Seguros, como administrador de la tesorería del Fondo.

El objetivo de la cobertura es fomentar contratos de suministro de electricidad, a medio y largo plazo, por parte de Consumidores Electrointensivos para facilitar a los productores la financiación de sus proyectos y garantizar la visibilidad sobre sus precios de la energía eléctrica. Para que funcione bien, se ha previsto que haya una garantía que cubra el riesgo de impago del comprador de la energía, de la que se hará cargo Cesce por cuenta del Estado.