En un comunicado, advirtió que el Ayuntamiento de la ciudad “no puede permitir actos de homofobia en las casetas” a cuyos titulares concede las licencias necesarias, por muy privadas que sean. La Comisión de Fiestas Mayores no puede alegar "incapacidad para actuar", subrayó, y exigió al Consistorio la apertura de un expediente al propietario de la caseta.

Además, reclamó la retirada de dicho permiso “si este no se retracta públicamente de haber expulsado a una pareja de homosexuales que empezaron a bailar juntos.

“El argumento de que en una caseta privada puede hacerse lo que sus titulares quieran es inaceptable”, advirtió Facua Sevilla”, pues “con él podrían cometerse en ella todo tipo de actos delictivos”, señaló la organización.

Entre otros, agrega, se podrían dar comportamientos xenófobos, racistas y de exaltación del terrorismo o del franquismo; consumo de drogas ilegales, tabaco y alcohol por menores, o la venta de alimentos en mal estado, concluyó Facua.