Así lo revelan los datos definitivos extraídos por Servimedia del IPC de enero publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que dejan claro que pese a que en enero las aerolíneas lanzaron sus tradicionales campañas de descuentos, éstos no fueron de gran magnitud. Además, con respecto a diciembre, los billetes se encarecieron un 1,9%.

Con respecto al año anterior, la caída de precios fue del 14,3% en diciembre; del 9,6% en noviembre; del 11,3% en octubre; del 14,7% en septiembre; del 10,4% en agosto; y del 6,3% en julio.

Con estos descuentos, las compañías aéreas trataron de estimular la demanda tras el fin del estado de alarma que se produjo a mediados de junio. De hecho, la bajada de julio fue la primera después de la pandemia, ya que la anterior se produjo en enero.

Durante los meses de confinamiento los precios subieron de forma moderada. En junio y mayo lo hicieron un 0,9%, y un 0,8% en abril y marzo. Previamente, en febrero se encarecieron un 9,1%.

En cuanto al tipo de vuelos, en enero los billetes para volar al extranjero bajaron un 3,6%, mientras que los de vuelos nacionales lo hicieron un 4,9%. Esto supone un cambio de tendencia con respecto a meses anteriores, cuando los vuelos internacionales bajaban mucho más que los domésticos.

Ese mes, los aeropuertos españoles de la red de Aena registraron 2.814.424 pasajeros, un 83,4% menos que en enero de 2020. De ellos, 1.236.326 viajaron en vuelos internacionales, un 88,7% menos que en enero de 2020, y 1.544.509 lo hicieron en vuelos nacionales, un 74% menos.