Así lo aseguró durante una entrevista en Servimedia en el contexto la presentación de su candidatura para ser rector de la universidad madrileña, afectada por el ‘caso Cifuentes’, que ha investigado si la ex presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, indujo a falsificar un acta del máster que cursó en la URJC. El caso, que se falló el pasado lunes con la absolución de la presidenta, se conoció cuando Van Grieken era consejero de Educación en el equipo de Cifuentes.

Durante la entrevista, el exconsejero y catedrático de Ingeniería Química subrayó su confianza en las decisiones de Felipe VI para la educación de su heredera, ya que “de la misma manera que él fue formado de manera impecable”, en España y en el extranjero, con formación militar y en una universidad pública madrileña, apunta a la posibilidad de que la princesa Leonor estudie alguna etapa en España.

En este punto, el candidato manifestó su satisfacción por que el Rey eligiese la institución que Van Grieken aspira a dirigir para la formación de la princesa. “Me encantaría que confiara en nosotros para la formación de su hija”, dijo y calificó “de gran ayuda” y “una grandísima oportunidad” para que la URJC “cierre el capítulo” del ‘caso Cifuentes’.

CAMBIO DE NOMBRE

En el encuentro en Servimedia, el aspirante a regir la Rey Juan Carlos también defendió el papel del padre del actual monarca para la democracia en España y considera que eliminar el nombre del rey emérito de la citada universidad no es uno de los temas más importantes que actualmente tiene sobre la mesa.

“Si esta universidad lleva su nombre, lo tiene por el papel crucial que tuvo el rey emérito en un momento muy determinado en la historia de este país. Y creo que este papel lo hizo y todos deberíamos estar agradecidos a ese papel, de creer en la democracia. Y ese rol histórico no ha cambiado. Este revisionismo histórico llevaría a cambiar los nombres de prácticamente cualquiera”, argumentó.

Van Grieken considera que antes que ese debate, la URJC tiene otros problemas en ámbitos como las infraestructuras, la negociación con la Comunidad de Madrid de una financiación “acorde” para la universidad y retos en internacionalización y digitalización. “Esos son los problemas importantes”, zanjó.