Jeanmonod y Martin ya han tratado a una docena de personas aquejadas de dolores crónicos que no respondían al tratamiento farmacológico utilizando esta técnica, que consiste en la aplicación de ultrasonidos de alta intensidad a una región cerebral concreta, mientras se visualiza el proceso en tiempo real mediante resonancias magnéticas

El método ya se utilizaba con buenos resultados en el tratamiento del cáncer de próstata y útero, y actualmente se están realizando ensayos para su aplicación al cáncer de mama e hígado, pero hasta ahora no se contaba con la tecnología necesaria para aplicarlo a lesiones cerebrales, debido a que los huesos del cráneo dificultaban la aplicación del ultrasonido.

Ahora es posible gracias a un casco que permite una transmisión de los ultrasonidos a la zona a tratar, y los neurólogos suizos han obtenido buenos resultados en una docena de enfermos con dolor crónico por diversas causas, entre ellas amputaciones, traumatismos y hernias discales.

En el futuro la técnica podría aplicarse al tratamiento de la epilepsia y a la extirpación de tumores cerebrales sin cirugía.