Ribera aportó este dato en el Pleno del Senado al contestar una pregunta de Elisenda Pérez, de Esquerra Republicana, quien se interesó por las medidas del Gobierno para actuar en los municipios afectados por los temporales y para minimizar los efectos de nuevos episodios de este tipo.

“Este Gobierno ha sido extraordinariamente diligente a la hora de impulsar medidas sobre una respuesta eficaz a las emergencias”, comentó Ribera, antes de indicar que cuando Pedro Sánchez llegó a La Moncloa en junio de 2018 aún había pagos pendientes para restaurar los efectos del terremoto que sacudió Lorca (Murcia) en 2011.

Así, comentó que una “famosa” DANA (depresión aislada en niveles altos) afectó al sureste peninsular del 10 al 14 de septiembre de 2019 y el Consejo de Ministros aprobó pocos días después un real-decreto ley para activar ayudas a las zonas afectadas, con un montante de ocho millones de euros invertidos.

La borrasca Gloria azotó el sureste peninsular y Baleares en enero de 2020 y, según apuntó Ribera, el Gobierno activó “rápidamente” medidas de recuperación del litoral, si bien poco después se decretó el estado de alarma por la pandemia de la Covid-19 que confinó a buena parte de la población española y ralentizó el desarrollo de los trabajos identificados por los servicios de costas del Ejecutivo.

“Se ha venido trabajando desde entonces, hasta el punto de que se han invertido casi 39 millones de euros en la recuperación del litoral”, sentenció, antes de comentar: “Me interesa mucho agilizar los trabajos que queden pendientes”.

Ribera indicó que los temporales costeros deben integrarse en una respuesta que permita anticipar y minimizar sus impactos en zonas urbanizadas, por lo que su departamento ha trabajado en planes para hacer frente a la erosión costera y el aporte de sedimentos no contaminados procedentes de aguas arriba de los ríos.

Pérez comentó anteriormente que algunos destrozos del temporal Gloria “siguen sin solucionarse a día de hoy” y que algunos ayuntamientos han tenido que endeudarse para ofrecer soluciones frente a los daños de esa borrasca.

Además, indicó que se acerca una nueva temporada “llena de dudas e incertidumbre” para el sector turístico, ya que a los efectos de temporales pasados aún sin solucionar se une el miedo de que lleguen otros y las consecuencias de la pandemia del coronavirus.