En un comunicado, esta asociación mostró su rechazo al acuerdo que cerraron ayer, jueves, el Ministerio de Trabajo y Economía Social con las patronales CEOE y Cepyme y los sindicatos CCOO y UGT para determinar la relación laboral de los repartidores en las plataformas.

La asociación de plataformas de servicios lamentó “la posición que la CEOE ha tenido en la mesa del diálogo social, en la que ninguna de las propuestas del sector del reparto de comida a domicilio ha sido tenido en cuenta”.

En esta línea, criticó que las “cesiones” de CEOE han sido “totales”, incluyendo “la obligación de revelar los algoritmos, una medida que sin duda afectaría muy negativamente al desarrollo de la economía digital en España además de atentar contra los principios más básicos de la libertad de empresa y la propiedad industrial”.

La organización señaló tener “mucha preocupación” por el futuro del sector y el efecto de la laboralización “forzosa” de los repartidores en la restauración.

Destacó que otros países europeos “aprueban regulaciones que apoyan la economía digital con mayores protecciones para los repartidores autónomos” y “España parece ir en dirección contraria, poniendo en peligro” al sector, que aporta 700 millones de euros al PIB nacional, según indicó.

Según datos de la consultora AFI recogidos por la asociación, en 2019 había 30.000 repartidores, más de 64.000 restaurantes generaron ingresos a través del reparto a domicilio o ‘delivery’ y cinco millones de usuarios usaron las aplicaciones.

La patronal Adigital calcula que el 76% de los 30.000 repartidores que operan a través de plataformas, unos 23.000, perderán su fuente de ingresos con la desaparición del servicio en ciudades de menos de 100.000 habitantes y la reducción de horarios en el resto de ciudades.

Se estima que en los 12 meses siguientes a una transición al modelo de flotas se perderían más de 250 millones de euros de ingresos adicionales para los restaurantes por la nueva ley.