Los independentistas catalanes también reclaman la reprobación de la titular de Defensa por “negarse a investigar, y eventualmente depurar, las responsabilidades por la existencia de grupúsculos de extrema derecha en el Seno de las Fuerzas Armadas”.

De este modo, ERC consumó la amenaza que verbalizó la semana pasada su portavoz en la Comisión de Defensa, Joan Josep Nuet, durante la comparecencia de Robles en la que ésta dio cuenta del plan de vacunación en las Fuerzas Armadas y de las razones por las que el exjefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad) general Miguel Ángel Villarroya se vacunó antes de tiempo.

En esa comparecencia, la titular de Defensa explicó que el exjemad llegó a dictar una instrucción interna de vacunación sin su conocimiento y sin el de la subsecretaria de Defensa que excedía de sus competencias y que no respondía a los criterios de valoración de la estrategia general del Ministerio de Defensa.

Esa instrucción, dijo Robles, establecía que entre el 18 y el 22 de enero se vacunaría al siguiente personal miliar, civil y funcionario: Jemad; su gabinete; Estado Mayor Conjunto (Emacon), compuesto de 60 personas; la Jefatura de Recursos Humanos, con nueve personas; “y así, hasta 370 personas”. No obstante, dijo desconocer el número exacto de personas que se han vacunado en el Estado Mayor de la Defensa a partir de la referida instrucción dictada por el general Villarroya.

En su exposición de motivos, ERC lamentó que la única consecuencia de lo anterior haya sido la dimisión del general Villarroya, a quien, dijo, se le colmó “con todos los honores y reconocimientos” al nombrársele miembro de la Asamblea del Real y Militar Orden de San Hermenegildo y consejero de Defensa en la misión observadora permanente de España ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) y asesor para Asuntos de Seguridad Hemisférica.

ERC adujo que “la reinterpretación de la Orden emitida por el Ministerio de Defensa sobre el protocolo de vacunación ha puesto en peligro más de 300 vidas, y esta acción debería tener consecuencias. Unas consecuencias que la ministra se niega a llevar a cabo”.

Añadió que es “intolerable” que “más de 300 personas sigan en el anonimato, sin asumir responsabilidades, y manteniendo su posición en el escalafón militar, y es más intolerable si cabe que lo hagan con el beneplácito de la ministra de Defensa. Al parecer, durante la pandemia todos eran "soldados", pero después solo algunos tenían "derecho a la vacuna”.

ERC subrayó que Robles ha pasado por alto “todas las muestras y exhibiciones de simbología neonazi y fascista por parte de militares en activo, tanto de altos rangos (como un capitán del Ejército del Aire) como de militares de tropa”.

Por todo ello, reclamó la reprobación de la ministra de Defensa en el Pleno del Congreso de los Diputados.