La basura y las construcciones costeras, el "caballo de Troya" de las medusas en el Mediterráneo

- Los expertos no pueden confirmar aún que su presencia esté aumentando en todo el planeta

MADRID
SERVIMEDIA

Los pólipos que dan lugar a las medusas se instalan en estructuras artificiales de aguas costeras, por lo que la basura y las construcciones asociadas al desarrollo de la acuicultura y de otras industrias costeras podrían estar favoreciendo su proliferación en las playas.

Así lo anunció este jueves en Madrid Carlos Duarte, investigador del CSIC que coordina un proyecto internacional que trata de determinar si realmente están aumentando las proliferaciones de medusas en el mundo.

"Estamos teniendo cada vez más evidencias en el Mediterráneo de que estos pólipos tienen una preferencia por asentarse en sustratos artificiales, como plásticos, botellas, basuras, muelles, espigones o boyas. A lo mejor estamos sembrando el océano de un hábitat muy apropiado para que sigan generándose proliferaciones de medusas", señaló Duarte.

Así, estas estructuras podrían estar funcionando como un "caballo de Troya" que desencadena la llegada de nuevos bancos de estos cnidarios a la costa.

Pese a la extendida creencia de que estos animales acabarán "dominando" los ecosistemas oceánicos, los expertos consideran que "aún no es posible dar una respuesta" al fenómeno. "No tenemos series temporales de datos lo bastante largas y sabemos que puede haber variaciones muy drásticas en las proliferaciones de medusas de un año a otro", señaló Rob Condon, de la Universidad de Alabama (Estados Unidos).

Sin embargo, aunque los científicos insisten en que "no se puede concluir que nos dirijamos a una invasión", no cuestionan el aumento de su presencia durante la última década en zonas como el Mediterráneo, el mar de Bering o las costas japonesas.

Para Josep Maria Gili, del Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona (CSIC), "el Mediterráneo es una de las zonas del planeta donde más evidente resulta el aumento de sus poblaciones". En su opinión, el aumento en este mar podría ser un fenómeno local y resersible.

Estos expertos, procedentes de seis instituciones de Europa, Australia, Estados Unidos y Asia, están creando una base de datos (JEDI, según sus siglas en inglés) que aúna toda la información disponible en el planeta sobre proliferaciones de medusas. JEDI ya cuenta con 530.000 entradas y estará disponible en menos de un año.

MENOS DE 100 EXPERTOS

Según informó Duarte, en el mundo existen menos de 100 científicos dedicados a estudiar la ecología de este fenómeno. Aunque su presencia en las costas interfiere con el turismo, la pesca y la acuicultura, los expertos destacan también el valor de los cnidarios en el mantenimiento de la biodiversidad (sirven de alimento a las tortugas, por ejemplo) o sus múltiples aplicaciones biomédicas y biotecnológicas.

"No son seres horribles, viles y villanos. También son bellos, llevan 500 millones de años en los océanos y tienen un importante papel en los ecosistemas", concluyó Duarte, que confesó que en ocasiones no le "alegran" algunos titulares de prensa.

(SERVIMEDIA)
15 Sep 2011
LLM/gja