La princesa Leonor, que estuvo acompañada en esta histórica visita por la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo y por el director del centro, Luis García Montero, dejó dos libros en la caja de las letras 2021, el año en curso, caja que está entre la del escritor Miguel Delibes y la de Severo Ochoa. Un ejemplar de la Constitución española y otro de 'El Quijote'.

El 31 de octubre de 2018, la princesa leyó el primer artículo de la Constitución en la sede del Instituto Cervantes, el día que cumplía 12 años, dentro de los actos conmemorativos del 40 aniversario de la aprobación de la Carta Magna por el Congreso de los Diputados, pero en esa primera ocasión estuvo acompañada por sus padres y su hermana.

No estaba previsto que la princesa tomara la palabra, pero tras terminar la exposición general sobre los retos del Cervantes que hizo la secretaria general, Carmen Noguero, la princesa de Asturias pidió el micrófono para comentar que como estudiante de la ESO ella consultaba algunas de las herramientas digitales que ofrece el Cervantes y también para preguntar si las personas que trabajan en el Instituto Cervantes fuera de España han podido volver para ver a sus familiares por las restricciones de la pandemia sanitaria.

El director del Cervantes, Luis García Montero, destacó en varias ocasiones la importancia de la visita de la heredera para la institución que preside y que protege y lucha por enriquecer el español y las lenguas cooficiales porque "nuestro idioma es un valor esencial", subrayó.

"Aquí conservamos el legado de los grandes artistas de las letras españolas e hispanoamericanas. La riqueza de un país es su cultura, la defensa de su lengua y de sus artes. El mayor compromiso con el futuro es tener en cuenta la herencia de sus creadores. La cultura crea vínculos de hermandad, que tiene consecuencias diplomáticas, históricas y económicas que nos compromete con el futuro", concluyó.

Por su parte, Noguero explicó la transformación tecnológica que llevará a cabo el Instituto Cervantes y recalcó que "queremos que el español, una lengua que hablan 500 millones de personas, se vincule a la ciencia y a la innovación" y apostó por la creación de "redes de entendimiento, de diplomacia cultural porque el mundo digital ha venido para quedarse".

La heredera recibió tres libros: ' Joana' de Joan Margarit, 'Antología poética' de Luis García Montero y "Quisiera tener todas las voces. Poesía de las lenguas de España", editado por el Instituto Cervantes.

El acto fue muy restringido por la actual situación de pandemia y todos los asistentes llevaban mascarilla. La de la princesa Leonor era del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).