Así se recoge en el 16º informe anual del Consejo Mundial de Energía Eólica (GWEC, por sus siglas en inglés), dado a conocer este jueves. A través de innovaciones tecnológicas y economías de escala, el mercado mundial de la energía eólica casi se ha cuadruplicado en tamaño en la última década y se ha establecido como una de las fuentes de energía más rentables y resilientes de todo el mundo.

En 2020, el crecimiento récord fue impulsado por un aumento de las instalaciones en China y Estados Unidos -los dos mercados de energía eólica más grandes-, que, juntos, aglutinan el 75% de las nuevas instalaciones en 2020 y representan más de la mitad de la capacidad total de energía eólica del mundo.

Actualmente, hay 743 GW de capacidad de energía eólica en todo el mundo, lo que ayuda a evitar más de 1.100 millones de toneladas globales de CO2, equivalentes a las emisiones anuales de carbono de Sudamérica.

Como tecnología de energía limpia con mayor potencial de descarbonización por megavatio (MW), el informe muestra que la tasa actual de despliegue de energía eólica no será suficiente para lograr la neutralidad del carbono a mediados de este siglo y los responsables políticos deben tomar medidas urgentes ahora para aumentar la energía eólica al ritmo necesario, según el informe.

De acuerdo con los escenarios establecidos por organismos internacionales de energía como Irena (Agencia Internacional de las Energías Renovables) e IEA (Agencia Internacional de la Energía), el mundo necesita instalar un mínimo de 180 GW de nueva energía eólica cada año para limitar el calentamiento global a muy por debajo de 2°C respecto de los niveles preindustriales.

Por tanto, hace falta instalar hasta 280 GW anuales para mantener una vía que cumpla con las cero emisiones netas para 2050. Esto significa, según el GWEC, que la industria y los responsables de la formulación de políticas deben trabajar en colaboración y actuar rápidamente para acelerar el despliegue.

“EMERGENCIA CLIMÁTICA”

Por ello, el Consejo Mundial de Energía Eólica pide a los responsables políticos que adopten un enfoque de "emergencia climática" para permitir un aumento más rápido de instalación de esta energía.

Este enfoque supone eliminar la burocracia y reformar las estructuras administrativas para acelerar y racionalizar la concesión de licencias y permisos para proyectos; llevar a cabo un aumento masivo de las inversiones en red, puertos y otras infraestructuras necesarias para permitir el aumento de las instalaciones, y modernizar los mercados de energía para asegurarse de que representan los verdaderos costes sociales de los combustibles fósiles contaminantes y facilitar una transición rápida a un sistema basado en energía renovable.

"La gente y los gobiernos de todo el mundo se están dando cuenta de que tenemos una ventana limitada para evitar el peligroso cambio climático. Si bien muchas economías importantes han anunciado objetivos netos cero a largo plazo, debemos asegurarnos de que se tomen medidas urgentes y significativas ahora para asegurarnos de que esta ambición se combina con inversiones e instalaciones de energía renovable de rápido crecimiento sobre el terreno y en el agua”, apuntó Ben Backwell, consejero delegado de GWEC.

Backwell indicó que las previsiones actuales del mercado muestran que se instalarán 469 GW de nueva capacidad de energía eólica en los próximos cinco años y que hace falta instalar al menos 180 GW de nueva capacidad cada año hasta 2025, lo que significa que actualmente se está en camino de recortar 86 GW de promedio anual. “Cada año nos quedamos cortos, la montaña para escalar en los próximos años se eleva", agregó.