Interior

El PSOE y sus socios rechazan una iniciativa del PP de condena de la violencia que incluía la petición de cesar a Marlaska

MADRID
SERVIMEDIA

El PP no ha logrado los votos suficientes para que el Congreso inste al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a cesar de inmediato al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, como pidió en una iniciativa que perseguía condenar “la legitimación” de la violencia de miembros del Gobierno. Frente a su pretensión, se encontró con una defensa cerrada de la labor del ministro por parte del PSOE y el rechazo de sus socios a sumarse a esta condena en los términos propuestos.

Este jueves, en la votación, el partido que lidera Pablo Casado no logró el respaldo suficiente para que prosperase la proposición no de ley, al contar con 189 votos en contra, 146 a favor y 6 abstenciones.

En nombre del PP, Guillermo Mariscal fue el encargado de defender esta proposición no de ley con la que el principal partido de la oposición quería que el Congreso defendiese a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y condenase los episodios de violencia callejera que se produjeron tras la encarcelación del rapero Pablo Hasél.

No obstante, Mariscal explicó que el Grupo Parlamentario Popular decidió ampliar el objeto de su proposición no de ley para exigir también que Sánchez ordene “la destitución inmediata de Marlaska” tras la sentencia de la Audiencia Nacional del 31 de marzo relativa al cese del coronel Diego Pérez de los Cobos.

De esta forma, Mariscal dedicó buena parte de su intervención a pedir apoyos para empujar a Sánchez a que cese a Marlaska “por no garantizar la seguridad de los españoles, por generar desasosiego, por las continuas injerencias en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”, además de “por no defender la libertad y la legalidad en todo el territorio por igual”.

Según el PP, la labor del ministro del Interior “se caracteriza por la indignidad”, por “una gestión irresponsable y por un proceder plagado de decisiones sectarias y arbitrarias”. A ello unió el “pacto” de Sánchez con EH Bildu “liderado” por Marlaska y consideró que “el silencio” de este ministro ante los últimos episodios de violencia callejera en Barcelona o en Madrid contribuye al proceso de normalización de este tipo de actos “alentado” desde el Gobierno.

“La violencia no es un hecho nuevo, la novedad se encuentra en la legitimación de la violencia desde los miembros del Consejo de Ministros”, indicó el defensor de esta iniciativa. Tras ello, el diputado de Vox Pedro Fernández defendió una enmienda que dijo que “complementa perfectamente” esta proposición tras aludir a lo acaecido en el mitin de su partido en Vallecas en el que varias personas fueron agredidas.

“El otro día fuimos nosotros quienes recibimos esas pedradas. Los próximos días pueden ser ustedes”, avisó a la bancada del PP. Tampoco perdió ocasión para recriminar a Cs su actitud: “Nosotros sí condenamos siempre los actos violentos contra ustedes, cosa que ustedes no hacen. Y eso a pesar de su conducta lamentable y patética en Murcia y a pesar de que hayan vendido su alma a la izquierda”, espetó al partido de Inés Arrimadas.

El diputado de Vox compartió la esencia de esta iniciativa para condenar la forma de proceder de “miembros del Gobierno por el apoyo a los actos de violencia producidos las últimas semanas”. “Estamos hablando de la condena a la constante violencia que viene siempre de los mismos, de la izquierda”, enfatizó, cargando contra los “cientos de energúmenos que nos rodearon, nos insultaron y nos lanzaron todo tipo de objetos” en Vallecas.

Por parte de Cs, Miguel Gutiérrez replicó al representante de Vox que debería preocuparse por el alma de su partido, ya que en ocasiones “parece un poco negra”. Aseguró a continuación que todos los diputados de Cs han condenado lo que pasó a Vox en Vallecas, por lo que exigió que “no vengan aquí a mentir”. Del mismo modo, se pronunció tajante en contra de Podemos y consideró que “no merecen estar en el Gobierno” tras “jalear y justificar” disturbios callejeros.

El PP recibió un respaldo total por parte del diputado de UPN Sergio Sayas, quien avanzó que “por supuesto” que se sumaría a esta iniciativa. Consideró que Marlaska no puede seguir “ni un minuto más” al frente del Ministerio del Interior y censuró que el Gobierno “cuente con ministros que jalean y aplauden a violentos”.

APOYO A MARLASKA

Los socialistas, a través de Ignacio López, dieron su apoyo “sin fisuras” a un ministro “con una magnífica gestión como Marlaska” quien “además ha puesto fin a esa policía política deleznable que tenían ustedes [en el PP]”. “Y eso es lo que les molesta”, enjuició, antes de valorar que los populares “no han traído esta proposición ni para condenar la violencia ni para apoyar a los Cuerpos de Seguridad”, sino para “atacar a este Gobierno”.

En todo caso, el diputado del PSOE trasladó su “más firme condena ante la violencia” y lo hizo “sin peros y sin matices”, como también apoyó “sin fisuras” a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Analizó, a continuación, que las violencias nacen de los “discursos de odio” y por eso llamó al PP a combatirlos “y no pactar con ellos si quieren ser creíbles".

En nombre de Unidas Podemos, Enrique Santiago se revolvió contra el PP por pretender “criminalizar el derecho de manifestación o la libertad de expresión y manifestación recogidas en la Constitución”. En su opinión, el partido de Pablo Casado y Vox, “su álter ego”, “hacen del odio y del desprecio hacia el diferente su principal seña política”.

Santiago se quejó con vehemencia de que el PP “no sale ni saldrá públicamente a defender a la mayoría silenciosa y trabajadora”, a esos vecinos “insultados y agredidos” en los barrios, mientras que sí da la cara para “blanquear a quienes extienden el machismo, el racismo, el odio y la homofobia” que atribuyó a Vox.

Jon Iñarritu, de EH Bildu, directamente dijo que el PP se ha hecho una “autoenmienda” y le acusó de preocuparse más por el estado de un contenedor o de una marquesina que por el hecho de que a unas personas que participan en una movilización “les saquen un ojo o les abran la cabeza”. “En Vallecas vimos a un policía nacional lanzando piedras”, dijo, y pidió que en el PP expliquen “qué modelo policial es ese”.

Desde el PNV, Mikel Legarda también cuestionó que el PP haya dado a su iniciativa una vuelta de “180 grados” y recordó que su formación ya manifestó en su día su rechazo a las letras de Hasél y a toda manifestación acompañada de violencia. Sin embargo, anticipó su rechazo a esta iniciativa por su redacción y no consideró pertinente pedir la reprobación de Marlaska por el cese de Pérez de los Cobos cuando todavía es una cuestión pendiente de resolución judicial “firme”.

Joan Baldoví, de Compromís, preguntó al PP si de verdad que esto es lo que preocupa a los ciudadanos. “¿O estamos en campaña o temen que alguien les coma la tostada?”, planteó al principal grupo de la oposición, al tiempo que dijo que para él el mayor “energúmeno” es aquel que vive del odio y “provoca deliberadamente saltándose la línea policial para intentar buscar el lío”.

Desde Junts, Míriam Nogueras recordó que la convocatoria urgente de la Junta de Seguridad de Cataluña “no es competencia de esta Cámara” y que el Parlament se ha pronunciado de forma contundente contra la violencia urbana. Finalmente, por parte del BNG, Néstor Rego cargó contra el PP porque “cuando se trata de dilucidar derechos sociales democráticos siempre optan por la política del garrotazo” y consideró que este partido debería estar agradecido al PSOE por ser el Gobierno que “más ha utilizado” la denominada ‘ley mordaza’.

(SERVIMEDIA)
15 Abr 2021
MFN/gja