Una vez detectado el envío, se puso en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Éste es uno más de los envíos amenazantes de los últimos días. Hasta el momento han sido detectadas cartas amenazantes dirigidas a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; la Dirección General de la Guardia Civil, que dirige María Gámez; y el candidato de Podemos, Pablo Iglesias, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

La carta dirigida a Ayuso fue detectada en el centro de distribución de Correos de Sant Cugat (Barcelona). Lo Mossos d'Esquadra abrieron una investigación y el caso está judicializado en el juzgado número 1 de Rubí.

La carta dirigida a Zapatero contenía, además de los dos cartuchos citados, una nota amenazante. El paquete no tenía remitente ni destinatario, pero sí una nota en la que se citaba expresamente al expresidente socialista que ya está siendo investigada en el laboratorio de la Comandancia de la Guardia Civil.

Esta misiva amenazante se suma otra que llegó este martes a la sede central de la Dirección General Guardia Civil en Madrid y que contiene un mensaje con amenazas al líder de Podemos, Pablo Iglesias. Las fuentes de Interior consultadas indicaron que, tras realizar las pertinentes medidas de examen, se constató que en el interior del sobre había una nota con amenazas a Iglesias.

AMENAZAS Y 4-M

Al cuartel general del Instituto Armado llegó el miércoles de la semana pasada otra misiva, en este caso dirigida contra la directora general de esta institución, María Gámez. Esta carta amenazante fue preludio de la que el jueves recibieron el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el propio Iglesias.

Además, Reyes Maroto, titular de la cartera de Industria, Turismo y Comercio, recibió también la semana una misiva que contenía una navaja aparentemente ensangrentada. En este caso, la investigación policial concluyó que su remitente es una persona con problemas de salud mental.

Esta oleada de amenazas ha generado una intensa tormenta política tras decir la cabeza de lista de Vox en las elecciones madrileñas del 4-M, Rocío Monasterio, que condenaba estas cartas, pero que del Gobierno no se creía “nada”.

Esta posición de Monasterio llevó a Iglesias a abandonar el debate que se celebró el viernes pasado en la Cadena Ser, mientras que el cabeza de lista del PSOE el 4-M, Ángel Gabilondo, ha llamado a los otros partidos a aplicar un “cordón sanitario” a Vox.