"Si uno coge las ocurrencias alocadas en todo este tiempo”, dijo Ábalos en un acto del PSOE en Navalcarnero, “Groucho Marx se queda absolutamente enano con la capacidad productiva de Díaz Ayuso. Todos los días nos dice una barbaridad", pero que revela una forma de pensar, apuntó.

El ministro entró a responder a las descripciones de Ayuso sobre concepto de libertad sobre la que vira toda su campaña y afirmó que “esto de no encontrarse al ex, no sé si tiene que ver con la cantidad de habitantes o con la cantidad de ex”.

“Elecciones para la libertad, pero no para rendir cuentas”, espetó Ábalos a Ayuso tras criticar la convocatoria electoral cuando “no tocaba”. Según el dirigente socialista, la candidata del PP convocó elecciones solo para desprenderse de Ciudadanos, partido con el que compartía el Ejecutivo.

Así, explicó que “la que se presenta a presidenta, ya lo era, con los que gobernaba va a seguir gobernando, me da igual de quién sea las consejerías, porque, al final, la impronta la ha marcado la ultraderecha, esta relación de amor, impúdica, que manifiestan cuando son uno solo”.

En este sentido, Ábalos aprovechó para justificar que Ayuso no reivindique el pasado del PP en la Comunidad de Madrid pese a los 26 años que llevan gobernando. “El PP en Madrid no tiene el pudor que puede tener en otras partes de España, es un PP desvergonzado”.

“Esto es una aspecto que, en Europa, la derecha radical ya manifestó y no quiere verse permanentemente estigmatizada por sus vínculos con la dictadura, no quiere y, para evitar ese estigma han decidido ir de modo descarado” y llegan a reconocer que son de derecha y franquistas y “con mucho orgullo".

Aquí, en la Comunidad de Madrid, “mientras en otras partes con la ultraderecha no quiere nada, lo disimula, aquí el ticket ya sabemos cuál es: es Díaz Ayuso, con el PP de Madrid que no es cualquier PP, y Vox.”

Y aprovechó la coyuntura para arremeter también contra Ciudadanos. “Esa es la alternativa de gobierno que nos ofrecen y para eso han convocado elecciones, para quietarse a una organización que está en liquidación, pero ¿tanto les molestaba?”, preguntó Ábalos a los populares. “Dejarlos tranquilamente, que se liquidaba sola, no hacía falta convocar unas elecciones para desprenderse de una incomodidad”, concluyó.