La ceremonia está prevista, con aforo reducido por la Covid-19, a partir de las 12 del mediodía en la iglesia de San Antón, en la calle Hortaleza, en el centro de Madrid.

“Oficiar esta misa es una manera de dar consuelo a sus familiares, a sus amigos y a todas las personas que les querían, que eran muchos. Pero también es una manera de recordarles por haber puesto en riesgo sus vidas para contar al mundo sucesos que, de no ser por personas como ellos, no se conocerían. Los medios de comunicación ejercen una labor fundamental en esta sociedad para ponernos en contacto a unos con otros; para empatizar con los que sufren, con los que necesitan ayuda y apoyo. Son una fuerza que consigue cosas que de otra manera no se conseguirían”, destaca el sacerdote.

“Es lo menos que podemos hacer desde Mensajeros de la Paz”, comenta el padre Ángel. “Recuerdo cuando hice la misa por el cámara José Couso, en el año 2003, en la misma habitación de hotel de Irak donde recibió el impacto de bala que le mató, desgraciadamente”.

La misa podrá seguirse por ‘streaming’.