Consumo

OCU pide a la Comisión Europea que se prohíba el dióxido de titanio como aditivo alimentario

- La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) emitió este jueves un dictamen en el que concluyó que no es “seguro”

MADRID
SERVIMEDIA

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) solicitó este viernes a la Comisión Europea que se prohíba la utilización del dióxido de titanio (E-171) como aditivo alimentario después de que este jueves la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) emitiese un nuevo dictamen científico en el que concluyó que no es “seguro” con esta finalidad.

OCU dijo esperar que este dictamen de la EFSA, que actualiza su evaluación previa sobre la seguridad del aditivo alimentario dióxido de titanio (E171), autorizado en la UE de acuerdo con el Reglamento (CE) Nº 1333/2008, se “traduzca” en la “definitiva” prohibición de esta sustancia como aditivo alimentario y recordó que, junto con otras organizaciones de consumidores europeas, lleva años solicitando su eliminación de la lista de aditivos autorizados.

El dióxido de titanio es una sustancia tecnológica compuesta por nanopartículas, de un tamaño inferior a 100 nanómetros, que contiene como máximo el 50% de las partículas de tamaño nanométrico a las que pueden estar expuestos los consumidores y se utiliza como colorante alimentario, principalmente en repostería, panadería, sopas, caldos y salsas, ensaladas y pastas saladas para bocadillos, aunque también está presente en cosméticos, pinturas y medicamentos.

A juicio de OCU, el “peligro” de su uso como blanqueante alimentario es que, tal y como indicó la EFSA, a pesar de que la absorción de las partículas de dióxido de titanio “es baja tras su ingestión oral, éstas pueden acumularse en el organismo”. Además, incidió en que la EFSA acaba de confirmar que no es “descartable” su genotoxicidad, esto es, su capacidad para dañar el ADN y generar efectos cancerígenos, algo que la agencia consideró “clave” para adoptar su decisión.

En concreto, el panel de expertos sobre aromas y aditivos alimentarios de EFSA concluyó en este nuevo dictamen que, tras evaluar todos los estudios y datos científicos disponibles, el dióxido de titanio “no puede seguir siendo considerado seguro como aditivo alimentario” y tampoco puede fijarse un nivel seguro para la ingesta diaria del aditivo, tal y como precisó el profesor Maged Younes, presidente de la Comisión Técnica de Aditivos y Aromas Alimentarios (FAF) de la EFSA.

Por ello y hasta que se confirme su prohibición como aditivo alimentario, OCU recomienda evitar el consumo de los alimentos que lo contengan, entre los que citó “muchos” dulces y golosinas, y la utilización de otros productos donde es usado para su recubrimiento. Finalmente, recordó que, al igual que cualquier otro, este aditivo debe aparecer entre los ingredientes de la etiqueta, bien por su nombre o como E-171.

(SERVIMEDIA)
07 Mayo 2021
MJR/pai