El informe admite que en España la situación relativa es “mejor” que en otros países europeos, pero alerta del auge del discurso de odio en redes sociales y del aumento de los mensajes de organizaciones extremistas, ante lo que la administración no actúa de forma decidida.

La comunidad con mayor número de incidentes registrados es Cataluña, con 129 casos, seguida de Andalucía (88), Madrid (85) y Valencia (70). Figuran a continuación Castilla y León, con 59; País Vasco, con 46; Navarra, con 37; Baleares, con 30; Aragón, con 27; y Murcia, con 21. El resto suman en torno al centenar, si bien se observan casos en todas las autonomías.

Insultos racistas en el fútbol, ataques contra personas homosexuales y transexuales y amenazas a entidades judías y musulmanas son ejemplos de este tipo de crímenes recogidos en el informe, que en 2020 alerta también de la discriminación contra los ciudadanos asiáticos o las personas mayores.

Incluso, se detectaron casos contra personas procedentes de la Comunidad de Madrid y que se encontraban en otras zonas de España, fruto de la crisis causada por la Covid-19, subrayó la ONG.