Los técnicos comenzaron los trabajos por la zona de Amposta y seguirán realizando estas tareas durante los próximos cinco meses, según informó Transición Ecológica.

Simultáneamente, empezarán los trabajos para el estudio de la dinámica de sedimentos en el tramo bajo del río Ebro, que consistirán en realizar un reconocimiento batimétrico y un estudio sedimentológico de los embalses de Ciurana, Margalef y Guiamets -con una duración estimada de cuatro meses- y la caracterización de los cauces y sedimentos de los ríos Ciurana, Montsant y Asmat, situados aguas abajo de esos embalses. Estos trabajos se realizarán durante los próximos tres meses.

En la segunda fase se realizará la batimetría del embalse de Mequinenza y la caracterización de sedimentos de los embalses de Mequinenza y Ribarroja.

Dentro de este mismo marco, la Confederación Hidrográfica del Ebro, en colaboración con el Instituto Geográfico Nacional, realiza una nivelación topográfica de alta precisión para avanzar en la cuantificación del proceso de subsidencia del Delta del Ebro.

Transición Ecológica destinará más de un millón de euros a la ejecución de trabajos de cartografía para establecer los mejores mecanismos de estudio de sedimentos.

La vicepresidenta cuarta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, anunció la semana pasada en el Pleno del Congreso que que el Ejecutivo aprobará “a principios de agosto” el Plan de Protección del Delta del Ebro tras haber analizado las más de 600 alegaciones recibidas.