Clima y salud

Invertir en meteorología, alerta temprana y clima salva 23.000 vidas al año

- Sólo un 40% de los países tienen sistemas de alerta eficaces

- Según una alianza internacional formada por una agencia de la ONU y otras instituciones

MADRID
SERVIMEDIA

La mejora de los pronósticos meteorológicos, los sistemas de alerta temprana y la información climática —los denominados servicios hidrometeorológicos— permitiría salvar 23.000 vidas al año y podría generar beneficios anuales de al menos 162.000 millones de dólares (unos 137.000 millones de euros).

Así se recoge en el primer informe sobre deficiencias en el ámbito hidrometeorológico, elaborado por la Alianza para el Desarrollo Hidrometeorológico y presentado este jueves.

Esta Alianza está integrada por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) -agencia de la ONU especializada en el tiempo, el clima y el agua- y por instituciones internacionales humanitarias, financieras y para el desarrollo. Inició su andadura en la Cumbre del Clima celebrada en Madrid en diciembre de 2019, conocida como COP25.

El informe describe el camino que queda por recorrer para poder aprovechar los beneficios que reportarían unos servicios meteorológicos y climáticos eficaces. Para alcanzar ese objetivo, debe acometerse una compleja empresa a escala local y mundial, cuyos retos también se exponen en el trabajo. Asimismo, se proponen medidas prioritarias que permitirían aplicar a mayor escala las iniciativas de apoyo concebidas para fortalecer las capacidades de los países en desarrollo.

En el informe se destaca el hecho de que las inversiones en sistemas de alerta temprana multirriesgos generan beneficios al menos 10 veces mayores que su costo, y se recuerda que esos sistemas son fundamentales para aumentar la resiliencia ante los fenómenos meteorológicos extremos. Sin embargo, sólo un 40% de los países dispone actualmente de sistemas de alerta eficaces y persisten importantes deficiencias en cuanto a los datos de observación vitales de los que dependen esos servicios, en particular en las naciones menos adelantadas y los pequeños Estados insulares en desarrollo.

"Nuestro clima está cambiando a gran velocidad. El decenio anterior fue el más cálido del que se tiene constancia. La temperatura media mundial supera en aproximadamente 1,2°C los valores de la época preindustrial. Y estamos muy lejos de reducir las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero para evitar los peores efectos del cambio climático y limitar el aumento de la temperatura a menos de 1,5°C, en consonancia con los objetivos del Acuerdo de París", afirmó el secretario general de la OMM, profesor Petteri Taalas.

Aunque la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero sigue siendo esencial, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha pedido que 2021 marque un antes y un después en materia de adaptación y resiliencia, y que se incrementen de forma significativa tanto el volumen como la revisibilidad de los fondos destinados a fines de adaptación.

La consecución de ese tipo de avances es esencial para que todas las personas, y en especial las más vulnerables, puedan adaptarse a las consecuencias de aquellos fenómenos meteorológicos y climáticos futuros que no puedan evitarse y sean más resilientes a ellas.

"Aunque la contribución de los países en desarrollo a las emisiones de gases de efecto invernadero es limitada, las consecuencias de los desastres causados por fenómenos meteorológicos relacionados con el clima son tres veces mayores en esos países que en los países de ingreso alto. La exactitud de los pronósticos meteorológicos y la solidez de las predicciones climáticas son fundamentales para la formulación de políticas de adaptación y la adopción de decisiones de inversión", comenta el presidente de Costa de Marfil, Alassane Ouattara.

(SERVIMEDIA)
08 Jul 2021
MGR/gja