Según comunicó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el beneficio bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 737 millones, un 14,6% más que el año anterior, por la contribución positiva de Abertis en el semestre.

Todas las actividades tuvieron un buen comportamiento operativo, desatacando especialmente la recuperación del tráfico en las autopistas de Abertis tras las fuertes caídas sufridas en 2020 por el impacto de la Covid-19. En concreto, la contribución de Abertis al Ebitda y al beneficio neto del grupo hasta junio mejoró en 77 y 62 millones de euros, respectivamente.

Las ventas de ACS alcanzaron los 13.330 millones, con una caída del 3,5%, afectadas por el tipo de cambio. Sin tener en cuenta este impacto, se mantienen estables.

Por áreas de negocio, infraestructuras obtuvo unas ventas de 12.412 millones, un 4,5% menos debido fundamentalmente a la evolución del mercado norteamericano, afectado por la depreciación del dólar frente al euro.

Dentro de infraestructuras, las ventas de construcción alcanzaron los 12.363 millones, con una disminución del 4,6% frente al año anterior. El crecimiento de la facturación en el segundo trimestre de 2021 “confirma las señales de recuperación que ya se percibían a finales del primer trimestre”. La cartera de obras a junio de 2021 asciende a 61.363 millones, un 96% internacional, y manteniéndose estable a pesar del impacto de la Covid-19.

En concesiones, también enmarcadas en infraestructuras, ACS destacó que Abertis “entra en la senda de la recuperación con un crecimiento del tráfico medio del 22,4% frente al primer semestre de 2020”. En el primer semestre, contribuyó al beneficio con 25 millones, 62 millones más que el año anterior.

El negocio de servicios industriales registró unas ventas de 103 millones, un 70,7% más, procedentes de los activos energéticos retenidos por ACS tras el acuerdo de venta del área de servicios industriales. La cartera está excluida del perímetro del grupo por reclasificarse como actividad mantenida para la venta.

En servicios, a través de Clece, se registraron unas ventas de 817 millones en el primer semestre, un 7,7% más que hace un año. La recuperación se produce tras la paralización temporal de buena parte de servicios sociales que, en el ejercicio anterior, cesaron su actividad durante el estado de alarma.

La cartera actual de esta área alcanza los 2.630 millones de euros, equivalentes a 20 meses de actividad.

En suma, la cartera total de ACS a junio de 2021 se sitúa en 63.993 millones, un 1,6% mayor que el año pasado a pesar del impacto por la depreciación del dólar estadounidense frente al euro. Sin este efecto, la cartera crece un 3,3%.

Por geografías, las ventas de ACS en América del Norte representaron un 60% del total, Australia supuso un 19%, Europa un 17%, Asia un 3% y América del Sur el restante 1%. Por países, Estados Unidos, Australia, España, Canadá y Alemania contribuyeron con un 92% del total de las ventas. Las ventas en Estados Unidos representan ya el 53% del total, mientras que en España suponen un 11% del total tras el acuerdo de venta de servicios industriales.

Por otra parte, ACS cerró junio con una deuda neta de 2.976 millones, lo que supone una reducción de 715 millones respecto al primer trimestre.