Energía

Investigadores de Repsol y Enagás desarrollan una tecnología pionera para la producción de hidrógeno renovable

MADRID
SERVIMEDIA

Un equipo de investigadores de Repsol y Enagás ha logrado desarrollar, tras casi una década de trabajo, una tecnología pionera para la producción de hidrógeno renovable a partir del uso directo de energía solar, en un proceso conocido como fotoeletrocatálisis.

Este proyecto es un desarrollo de I+D 100% español, liderado por mujeres y realizado en colaboración con varios de los centros de investigación en hidrógeno más prestigiosos del país.

El próximo paso será la construcción de una planta de demostración en el complejo industrial que Repsol tiene en Puertollano (Ciudad Real), con el horizonte de alcanzar la madurez comercial antes de 2030.

Ana Martínez, investigadora de Repsol Technology Lab y una de las líderes del proyecto, destacó el papel que va a tener el hidrógeno como vector energético clave en la descarbonización. “Va a permitir, por un lado, almacenar las energías renovables a gran escala, y, por otro, utilizarlo como combustible en diferentes sectores, como puede ser la movilidad, en el ámbito residencial e industrial y, también, como materia prima en la industria”, explicó.

La fotoelectrocatálisis, que permite emplear solo agua y energía solar para producir hidrógeno renovable, es una de las vías tecnológicas en las que trabaja Repsol para descarbonizar la generación de este gas. “Somos el primer productor y consumidor de hidrógeno en España y esta tecnología supone una reducción total de las emisiones en relación con los métodos convencionales usados para generar H2”, afirmó María Dolores Hernández, colíder del proyecto. “El impulso que está dando Repsol a los proyectos relacionados con el hidrógeno renovable y, concretamente, a través de esta tecnología, nos permitirá seguir avanzando en nuestra apuesta por la multienergía y la sostenibilidad, teniendo como meta ser cero emisiones netas en 2050”.

La investigación sobre la tecnología de fotoelectrocatálisis arrancó en Repsol Technology Lab en 2012 y, en 2018, Enagás se sumó al proyecto con un acuerdo que convierte a ambas compañías en copropietarias. “Es una tecnología muy disruptiva”, aseguró Mónica Sánchez, coordinadora de Hidrógeno de Enagás, “que se enmarca en nuestra apuesta por los gases renovables, en concreto hidrógeno y biometano, como piezas clave para alcanzar la neutralidad en carbono que queremos conseguir a nivel europeo, y en concreto como compañía para 2040”.

SIMPLIFICACIÓN

Esta tecnología simplifica el proceso de producción con respecto a la electrólisis, la opción más utilizada hoy en día para la generación de hidrógeno renovable y donde la energía para llevar a cabo el proceso procede del sol o del viento. Esa electricidad renovable es transportada a un electrolizador donde se separa la molécula del agua en hidrógeno y oxígeno.

La fotoelectrocatálisis, sin embargo, integra el proceso en un solo paso: “el dispositivo recibe directamente la radiación solar y con un material fotoactivo se generan las cargas eléctricas que provocan esa separación”, explicó María Dolores Hernández.

Con esta alternativa se evitan las pérdidas asociadas al transporte y la transformación de la electricidad, lo que hace que “la tecnología de fotoelectrocatálisis mejore la eficiencia del proceso de conversión de energía solar a hidrógeno con respecto a la electrólisis”.

Esta simplificación en infraestructura y equipos reducirá, además, las inversiones en esta tecnología, que también tiene la gran ventaja de no depender del precio de la electricidad. La hoja de ruta del proyecto “está concebida para que, en 2030, el gas generado por esta vía pueda competir en costes tanto con el producido por procesos convencionales a partir de gas natural, como con el obtenido por electrolisis”, agregó María Dolores Hernández.

Por su parte, Mónica Sánchez apuntó que “Enagás puede jugar un papel esencial en la integración e implementación del hidrógeno renovable en el sistema energético”. Este hidrógeno podrá ser transportado por la red existente para su distribución a los diferentes puntos de consumo, pudiendo de esta manera emplearse la infraestructura actual como almacenamiento energético de la generación eléctrica renovable.

(SERVIMEDIA)
24 Ago 2021
JRN/pai