El jurado, presidido por la directora general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (Inaem), Amaya de Miguel, también puso de manifiesto que los atributos que hacen a Juan Diego Botto acreedor del Premio Nacional de Teatro 2021 están presentes en su espectáculo ‘Una noche sin luna’, en el cual demostró “su naturaleza de hombre de teatro integral como dramaturgo e intérprete, así como la enorme vigencia que el discurso lorquiano posee en la actualidad”.

El Premio Nacional de Teatro se concede como “recompensa y reconocimiento a la labor de una persona o entidad en el ámbito teatral, puesta de manifiesto preferentemente a través de una obra o actuación hecha pública o representada durante el año 2020”, y está dotado con 30.000 euros.

Juan Diego Botto (Buenos Aires, 1975) debutó sobre las tablas en 1987 con ‘Alessio’, una obra de Ignacio García May producida por el Centro Dramático Nacional. Su trayectoria escénica continuó en la década de 1990 con obras como ‘Veinte años no es nada’, bajo la dirección de Eduardo Recabarren, y ‘El rufián de la escalera’, dirigida por su madre, la actriz, productora y maestra de actores, Cristina Rota, con quien también trabajó en ‘Rosencrantz y Guildenstern han muerto’ (2000) y en ‘Despertares y celebraciones’ (2007), obra firmada por él mismo después de dar el salto a la creación con ‘El privilegio de ser perro’ (2005).

En 2008 estrenó en el Teatro María Guerrero ‘Hamlet’, obra que dirigió y protagonizó junto a José Coronado, Marta Etura y Nieve de Medina, repitiendo como autor en ‘La última noche de la peste’ (2007) y ‘Un trozo invisible de este mundo’ (2012), título en el que estuvo dirigido por Sergio Peris-Mencheta, y con el que obtuvo el Premio Max al mejor autor revelación y al mejor actor. El tándem con Peris-Mencheta lo volvió a conformar para ‘Una noche sin luna’, una obra con la que sigue girando esta temporada.

Juan Diego Botto también cuenta con una extensa trayectoria en cine y en televisión, habiendo sido cuatro veces nominado a los Premios Goya por su participación en Historias del Kronen (1995), de Montxo Armendariz; ‘Plenilunio’ (2000), de Imanol Uribe; ‘Vete de mí’ (2006), de Víctor García León; e ‘Ismael’ (2013), de Marcelo Piñeyro.

También ha trabajado bajo las órdenes de directores como Vicente Aranda, en ‘Si te dicen que caí’ (1989); Ridley Scott, en ‘La conquista del paraíso’ (1992); Mariano Barroso, en ‘Éxtasis’ (1995); Achero Mañas, en ‘Todo lo que tú quieras’ (2010); Gerardo Vera, en ‘La Celestina’ (1996); John Malkovich, en ‘Pasos de baile’ (2002); y Daniel Calparsoro, en ‘Asfalto’ (2000).

Otros títulos destacados de su filmografía son ‘Martín Hache’ (1997), de Adolfo Aristarain; ‘Silencio Roto’ (2001) y ‘Obaba’ (2005), ambos con Montxo Armendariz.