Cumbre del Clima

Las emisiones mundiales de CO2 rebotan casi a niveles prepandemia

- Ascienden un 4,9% este año tras bajar un 5,4% en 2020, según Global Carbon Project

- Volverán a subir en 2022 si el transporte por carretera y la aviación se recuperan

MADRID
SERVIMEDIA

Las emisiones globales de dióxido de carbono (CO2) procedentes del uso de combustibles fósiles y la industria aumentarán este año un 4,9% hasta alcanzar 36.400 millones de toneladas gracias al creciente consumo de carbón y gas en centrales eléctricas y la industria -sobre todo en China- tras caer un 5,4% en 2020, lo que supone un repunte a casi los niveles anteriores a la pandemia de la Covid-19.

Así se recoge en el 16º estudio anual sobre emisiones de CO2 realizado por el consorcio académico Global Carbon Project y publicado en ‘Earth System Science Data’. El trabajo se ha enviado a la revista ‘Environmental Research Letters’ para ser sometido a revisión por pares.

El estudio se ha dado a conocer en la cuarta jornada de la Cumbre del Clima de Glasgow (Reino Unido -conocida como COP26), en la que diplomáticos de todo el mundo negocian para redoblar el objetivo del Acuerdo de París de que el planeta no se caliente más de 1,5ºC con respecto a la era preindustrial.

El trabajo suele presentarse en las Cumbres del Clima y constituye el primer análisis en profundidad de la cantidad de CO2 fósil procedente de combustibles fósiles (carbón, gas natural y petróleo), la industria y el cemento que queman los países de todo el mundo y dónde terminan.

Según el informe, basado en datos mensuales, las emisiones por el uso del carbón y del gas crecerán más este año de lo que cayeron en 2020 (un 5,7% y un 4,3% más, respectivamente) y superarán los niveles prepandemia (un 1% y casi un 2% más que en 2019, respectivamente). Sin embargo, las del petróleo subirán un 4,4%, pero, debido a un gran desplome en 2020, estarán casi un 6% por debajo de 2019.

“Esperábamos este repunte cuando la economía mundial volviera a la normalidad. Si aparcas tu coche durante un año, es el mismo vehículo contaminante cuando lo enciendes de nuevo. De manera similar, cuando la actividad económica regresa, también lo hacen las emisiones”, resumió Rob Jackson, profesor de Ciencias del Sistema Terrestre en la Universidad Stanford y presidente del Global Carbon Project.

PRINCIPALES EMISORES

En cuanto a algunos de los principales emisores, se prevé que China emita este año 11.100 millones de toneladas de CO2 (un 31% de las emisiones totales), lo que supone un 4% más que en 2020 y un 5,5% más respecto a 2019.

Estados Unidos alcanzaría 5.100 millones de toneladas de CO2 (un 14% del total), esto es, un 7,6% más respecto a 2020, pero un 3,7% menos que en 2019.

La UE emitiría 2.800 millones de toneladas de CO2 (un 7% del total), lo que representa un 7,6% más que en 2020 y un 4,2% menos que en 2019.

La India alcanzaría 2.700 millones de toneladas (un 7% del total), que significan aumentos del 12,6% respecto al año pasado y del 4,4% en relación a 2019.

Para el resto del mundo en su conjunto, se prevé que las emisiones de CO2 fósiles se mantengan por debajo de los niveles de 2019.

Así pues, este año vuelven las tendencias anteriores a la pandemia de disminución de emisiones de CO2 en Estados Unidos y la UE (que descendieron cerca de un 10% en 2020), y aumento en la India. En cuanto a China, su respuesta a la pandemia se traduce en un crecimiento de emisiones de CO2, empujado por la energía y la industria.

Los investigadores -que forman parte de la Universidad de Exeter, la Universidad de Anglia del Este, la Universidad Stanford y el Centro Internacional para la Investigación Climática y Medioambiental (Cicero), por ejemplo- indican que no puede descartarse un nuevo aumento de emisiones en 2022 si el transporte por carretera y la aviación regresan a los niveles previos a la pandemia y se estabiliza el uso del carbón.

"El rápido repunte de las emisiones a medida que las economías se recuperan de la pandemia refuerza la necesidad de acción global inmediata sobre el cambio climático", sentenció Pierre Friedlingstein, de la Universidad de Exeter (Reino Unido), quien añadió: "El repunte de las emisiones mundiales de CO2 fósil en 2021 refleja un retorno hacia una economía basada en fósiles pre-Covid. Las inversiones en economía verde en los planes de recuperación post-Covid de algunos países han sido insuficientes hasta ahora, por sí solas ".

Corinne Le Quéré, profesora en la Facultad de Ciencias Ambientales de la Universidad de Anglia del Este, apuntó que hará falta algún tiempo ver el efecto completo de la Covid-19 sobre las emisiones globales de CO2, aunque recalcó que “se ha avanzado mucho en la descarbonización global energía desde que se adoptó el Acuerdo de París en 2015”.

“Las energías renovables son la única fuente de energía que siguieron creciendo durante la pandemia. Ahora se necesitan nuevas inversiones y una política climática sólida para apoyar la economía verde de manera mucho más sistemática y sacar a los combustibles fósiles de la ecuación", agregó.

“A pesar de la tragedia de la pandemia de Covid en 2020, la fuerza y ​​la naturaleza del repunte de las emisiones de CO2 fósil muestra que el mundo ha hecho poco para enfocarse en una recuperación verde”, indicó Glen Peters, director de investigación de Cicero.

USO DE LA TIERRA Y CO2 ATMOSFÉRICO

Por otro lado, las emisiones netas globales de CO2 derivadas del cambio de uso de la tierra ascienden en esta última década a cerca de 4.100 millones de toneladas, con 14.100 millones de toneladas emitidas por la deforestación y otros cambios en el uso terrestre y 9.900 millones de toneladas eliminadas por bosques y suelos.

Al combinar las emisiones de CO2 de fuentes fósiles y el cambio neto de uso de la tierra, las emisiones totales se mantuvieron relativamente constantes en la última década, con un promedio de 39.700 millones de toneladas de CO2.

Con ello, los investigadores proyectan que la concentración de CO2 atmosférico aumente este año en 2,0 partes por millón (ppm) hasta alcanzar un promedio anual de 415 ppm, un crecimiento menor respecto a los últimos años debido a las condiciones climáticas de La Niña en 2021.

“El sistema climático está impulsado por la cantidad total de CO2 depositado en la atmósfera, con variabilidad interanual teniendo un papel modulador importante. El calentamiento global se detiene cuando las emisiones se acercan a cero”, destacó Peters.

(SERVIMEDIA)
04 Nov 2021
MGR/clc/gja