Lo hizo en una rueda de prensa en la sede del partido en Bilbao, donde, “para observar la globalidad” de la negociación, volvió a poner en valor la “importancia especial” de la gestión del Ingreso Mínimo Vital por el Gobierno vasco que el PNV obtuvo del Ejecutivo central a cambio de no presentar ni apoyar enmiendas a la totalidad del proyecto de Presupuestos. Con ello, resaltó, “se va a mejorar la gestión” y “se completa otro trozo de autogobierno”.

Aparte de ese logro, Esteban destacó que el PNV ha logrado incluir en el proyecto un total de 41 enmiendas, por un valor total de 31 millones de inversión directa en el País Vasco. Otras obras que se van a desarrollar durante varios años podrían suponer un montante adicional de entre 50 y 55 millones. Fuera del tema económico, destacó la transferencia al Gobierno autonómico de la gestión de la convocatoria de plazas de secretarios interventores.

Respecto al tren de alta velocidad, constató que “seguimos discutiendo para despejar la llegada del TAV a las capitales vascas y dar un impulso definitivo al proyecto” y que “queda un trámite largo todavía en el Senado”. Dijo que no quería “tensionar las cosas porque no es bueno para ninguna de las partes” y porque percibe “cierta sensibilidad por parte del Gobierno” para llegar a un acuerdo y “vamos avanzando positivamente”. No quiso dar detalles porque “lo importante es la discreción”.

No obstante, el portavoz subrayó que el PNV quiere que el proyecto “se concrete”, “verlo negro sobre blanco por parte del Gobierno” y que “ya no vale una promesa genérica” de que el tren de alta velocidad llegará a las tres capitales vascas. “Vamos bien pero quedan trámites y con alguien lo tendrá que sacar el Gobierno”, dejó caer, apuntando que “durante esa tramitación pueden pasar muchas cosas”.