Salud

La Fundación Nipace presenta la primera terapia con exoesqueleto pediátrico portátil

MADRID
SERVIMEDIA

La Fundación Nipace presentó este viernes la primera terapia con exoesqueleto pediátrico portátil, un dispositivo que se acopla al cuerpo de cada niño y, gracias a la inteligencia artificial, logra interpretar la intención de movimiento al caminar y le aporta la fuerza y la estabilidad necesaria para conseguirlo.

Con ello, los niños pueden mejorar su condición física y psicológica. A nivel físico, trabajan la espasticidad, esa rigidez y tensión muscular propia de la parálisis cerebral. Además de todas las ventajas que tiene el hecho de caminar a nivel circulatorio, respiratorio e incluso gastrointestinal, a nivel psicológico genera un gran impacto al permitir a cada niño a realizar actividades que antes eran impensables.

Estos beneficios clínicos se han demostrado precisamente en un ensayo clínico realizado en las instalaciones de Nipace. Según la directora de Tecnología, Formación e Investigación, Mayte Vega, "esto ha permitido ampliar el uso del exoesqueleto a esta patología, lo que va a suponer un cambio drástico en la atención a la parálisis cerebral infantil”.

La prevalencia global de la parálisis cerebral se sitúa aproximadamente entre el dos y el tres por mil de los niños nacidos en el mundo y afecta las habilidades motoras, al movimiento y a la postura del individuo. Para este propósito, la rehabilitación centrada en el Entrenamiento de la Marcha Asistida por Robot (RAGT) ha demostrado mejorar su movilidad y se está utilizando cada vez más en la neurorrehabilitación pediátrica para complementar la fisioterapia convencional.

Según explicó la directora de Personal, Terapias y Familia, Nora Sanz, “la adquisición del Atlas 2030 supone poder ofrecer a los pacientes más pequeños todas las ventajas de una neurorehabilitación en posición bípeda que hasta ahora no se les podía ofrecer. Supone un salto cualitativo en la rehabilitación de los más pequeños afectados por parálisis cerebral”.

Fundación Nipace realizó un estudio piloto para evaluar la viabilidad y adaptabilidad del exoesqueleto Atlas 2030 para sus niños con parálisis cerebral. Nueve niños con esta patología, de entre 3 y 9 años y con niveles III-V del Sistema de Clasificación de la Función Motora Gruesa (Gmfcs) recibieron rehabilitación con Atlas 2030 durante tres sesiones, probando marcha hacia adelante y hacia atrás, marcha en modo pasivo y activo.

Tras el análisis de la musculatura de las extremidades inferiores se comprobó que la espasticidad de algunos músculos se redujo significativamente después del uso del exoesqueleto y se redujeron la mayoría de los límites articulares, mostrando diferencias en cadera y flexión de rodillas. Para concluir, se comprobó que el exoesqueleto pediátrico Atlas 2030 es factible y adaptable para niños con parálisis cerebral en su uso clínico.

(SERVIMEDIA)
19 Nov 2021
STH/clc