La presentación de ‘Política para adultos’, que tuvo lugar en el Real Casino de Madrid, provocó la foto entre el líder del PP, Pablo Casado, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y que ambos conversaran tras posar en el ‘photocall’ junto con Rajoy, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.

El periodista Carlos Herrera hizo de maestro de ceremonias y precisamente comenzó la presentación hablando de “encuentros inesperados” y comentando que “a veces existe el milagro de la Navidad”. “Como si fuera usted Papa Noel y reuniera en una sala a parte de la familia que hace tiempo que no se ve”, dijo al expresidente, y le llegó a preguntar si está contento con esta situación, a lo que Rajoy hizo un gesto afirmativo y sonriente.

Así, se vio juntos a Casado y a Ayuso gracias a Rajoy, en mitad de la crisis por el Congreso del PP del Madrid al que la presidenta regional ya ha dicho que piensa presentarse y que pide que se celebre cuanto antes a pesar de que la dirección nacional aún ni lo ha convocado y lo sitúa en algún momento del primer semestre de 2022, sin especificar cuándo. La última vez que se les vio juntos en público fue el pasado 19 de octubre.

Fuentes del entorno de Ayuso y también de la cúpula del PP consultadas por Servimedia encuadraron este saludo y su conversación dentro de la “normalidad”. Es más, al finalizar el evento las cámaras captaron otra vez a ambos en el mismo plano intercambiando unas palabras y fuentes de Génova aseguraron que ambos se emplazaron a verse el próximo lunes, Día de la Constitución. En todo caso, desde la dirección del PP nuevamente subrayaron a esta agencia que los plazos para el Congreso del PP de Madrid están “marcados” por la Junta Directiva Nacional.

Sobre la situación del PP de Madrid también fue preguntado antes de comenzar este evento el alcalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, quien negó que sea un “milagro” que Casado y Ayuso se encuentren esta tarde. “Las agendas son complicas. Todos aquellos que decían que no se iban a ver aquí está la prueba de que no hay problema en que se vean y coincidan”, desatacó.

Para Almeida, hoy “no se cierran heridas porque para que se cierren heridas tienen que estar abiertas las heridas”, insistiendo así en que se está dando a todo lo que rodea al liderazgo del PP de Madrid “un lenguaje bélico que no se corresponde con la realidad”. En su caso, a pesar de quien le sitúa como posible rival de Ayuso, aseguró que en este evento estaría “como siempre” con Ayuso y que la saludaría “al margen de interpretaciones”.

Al tomar la palabra Rajoy en la presentación de su libro, lo primero que quiso fue agradecer la presencia del presidente de su partido. “Pablo Casado debe asumir pronto la Presidencia del Gobierno de nuestro país” y hacerlo por “el bien de todos”, enfatizó, y seguidamente pasó a agradecer a Ayuso su presencia y reconocer que fue “muy valiente” y “capaz de tomar decisiones en momentos difíciles, que en los fáciles las toma cualquiera”.

“CRÍTICAS ABSURDAS”

Rajoy se refirió a la gestión de la pandemia de Ayuso para opinar que fue objeto de “críticas absurdas por parte de la izquierda madrileña y de otra que anida no muy lejos”, aludiendo a La Moncloa. Confesó que la crítica que más le asombró fue por haber impulsado el Hospital Zendal, “algo absolutamente incompresible”, en su opinión. Así, le agradeció mucho que hoy esté aquí.

El que fuera líder de los populares también dio las gracias expresamente al alcalde de Madrid, y consideró que se ha ganado el afecto de muchos, desde luego el suyo. Tras ello, mencionó a su “buen amigo” Mañueco por haberse tomado la molestia de acompañarle hoy en la presentación de ‘Política para adultos’ y aplaudió su “brillante trayectoria”.

En definitiva, agradeció “de corazón” la presencia de todos los miembros del PP que hoy le acompañaron. “Yo he sido presidente del Gobierno no por lo listo que fuera, sino porque era del PP. Y voy a vender muchos libros porque soy del PP”, comentó el expresidente de los populares con su sorna habitual.

Durante la presentación, Rajoy dejó claro que cuando habla de política para adultos no se refiere a la edad de nadie, puesto que “se puede ser joven y adulto y mayor e infantil, o dicho de otra manera, tonto o chisgarabís”. Así las cosas, como hace en las páginas de su obra, cargó contra el “proceso de infantilización” al que se ve sometida la política “en los últimos tiempos” y también alertó contra los populismos.

No perdió ocasión para recetar “moderación y equilibrio”, pues son “lo más saludable para la vida y para la política”. Explicó que si ha escrito este libro, además de para divertirse y entretenerse, es también porque cree bueno señalar “algunas derivas que son malas para la convivencia y para la gente” que aprecia en España.

Avisó de que “no hay mejor manera de hacer política que atender a la economía, que es la vida de la gente”. “Sí a la democracia, no al populismo y sí a mejorar la democracia”, resumió como ejes de su libro, y se detuvo en algunas cuestiones, como en su defensa de la monarquía y del rey Juan Carlos al considerar que ha sido “atropellado inmisericordemente e injustamente”.

“Defiendo la independencia de la justicia”, prosiguió Rajoy, que también destacó que en su libro propone algunas reformas, entre otras la supresión de la acusación popular porque “solo sirve para hacer política y pone a mucha gente honorable en tela de juicio”. “Me muestro partidario del consenso”, añadió Rajoy.

Eso sí, en este punto matizó que el acuerdo al que llegó el PSOE para gobernar “supone vulnerar lo que fue el espíritu de la Transición”. “Se pide a la oposición que llegue a entendimientos”, reflexionó, y se preguntó aquí “cómo se puede llegar a entendimientos con alguien coaligado y que gobierna con Bildu o con partidos que no creen en España y quieren liquidarla”.

Del mismo modo, Rajoy avisó de que “no se puede hacer reformas por puro sectarismo”. “Hacer una reforma del mercado laboral después de que en España se aprobara una reforma que sirvió para que se crearan dos millones y medio de puestos de trabajo es un disparate”, sentenció el expresidente del Gobierno, que terminó declarándose optimista “a pesar de todo”.