La resolución pide que que se cumpla la tregua desde siete días antes del inicio de los Juegos Olímpicos, que comenzarán el 4 de febrero de 2022, hasta siete jornadas después del final de los Juegos Paralímpicos, que se clausurarán el 20 de febrero.

La resolución "subraya la importancia de la cooperación entre los Estados miembro para aplicar colectivamente los valores de la tregua olímpica en todo el mundo" y hace hincapié en el papel del Comité Olímpico Internacional (COI), el Comité Paralímpico Internacional (IPC, por sus siglas en inglés) y Naciones Unidas a este respecto.

También expresa la expectativa de que los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022 sean "una oportunidad significativa para aprovechar el poder del deporte para hacer avanzar al mundo fomentando una atmósfera de paz, desarrollo, resiliencia, tolerancia y comprensión, y dando la bienvenida a todas las delegaciones de los Comités Olímpicos y Paralímpicos Nacionales para participar en los Juegos".

La resolución exhorta a todos los Estados miembro a que cooperen con el COI y el IPC en sus esfuerzos por utilizar "el deporte como instrumento para promover la paz, el diálogo y la reconciliación en las zonas de conflicto durante y más allá del período de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos".

"El COI acoge con gran satisfacción el gran apoyo a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Invierno de Pekín 2022 por parte de todos los Estados miembro de la ONU, expresado a través de la adopción por consenso de la Resolución de Tregua. Éste es un gran reconocimiento a la misión de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de unir a los mejores deportistas del mundo en una competencia pacífica y estar por encima de cualquier disputa política", apuntó el presidente del COI, Thomas Bach.

Por su parte, el presidente del IPC, Andrew Parsons, apuntó que la visión de la entidad que preside es "hacer un mundo más inclusivo a través del deporte".

"El deporte puede unir a personas de todos los orígenes en paz y tener un impacto transformador en las sociedades. Ya hemos demostrado este año cómo los Juegos Paralímpicos y Olímpicos son un escaparate para el esfuerzo humano, la resiliencia y la esperanza. Cuando el mundo se une en amistad, enviamos un poderoso mensaje de que estamos celebrando la diferencia, mostrando lo mejor de la humanidad y que hay unidad en la diversidad", subrayó.

3.000 AÑOS DE HISTORIA

La tregua olímpica tiene una historia de unos 3.000 años de antigüedad, que data de cuando los antiguos griegos establecieron la 'ekecheiria', una tregua sagrada con el fin de permitir la participación en los Juegos Olímpicos de todos los deportistas y espectadores de las ciudades-estado griegas, que, de otro modo, estaban casi constantemente involucrados en conflictos entre sí.

La tregua olímpica o 'ekecheiria' es una tradición que se estableció en la Antigua Grecia en el siglo IX a.C. para garantizar el cese de todas las hostilidades, permitiendo el paso seguro y la participación de deportistas y espectadores que participaban en los Juegos Olímpicos.

Desde 1993, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha expresado repetidamente su apoyo a los Juegos Olímpicos y al COI, adoptando bianualmente -un año antes de cada edición de los Juegos Olímpicos- una resolución titulada 'Construir un mundo pacífico y mejor a través del deporte y el ideal olímpico'.

A través de esta resolución simbólica, la ONU invita a sus Estados miembro a observar la tregua olímpica individual o colectivamente, y a buscar, de conformidad con los objetivos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, la solución pacífica de todos los conflictos internacionales a través de medios pacíficos y diplomáticos, y a reconocer la importancia de las iniciativas del COI para el bienestar humano y la comprensión internacional.